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Yoongi caminaba hacia el baño por tercera vez en el día, comenzaba a arrepentirse de haber tomado tanta agua la noche anterior y antes de ir a la escuela.

Las aves cantaban, el sol era agradable y el aire lo hacía querer dormir de lo bien que se sentía. Una mañana tranquila y agradable, sin duda.

Pero en este momento no podía darse el lujo de apreciar la linda mañana, no cuando tuvo que caminar más rápido porque sentía que en cualquier momento se haría en los pantalones.

Suspiró cuando por fin llegó, y mientras dejaba salir todo se regañaba mentalmente.

Poco duró el reinado de la paz en aquél baño, pues pudo escuchar cómo dos jóvenes que si mal no recordaba eran del aula de al lado, hablaban sobre un tal "chico misterioso".

Él sólo se limitó a hacer como si no fuera de su incumbencia, cuando en realidad quería acercarse a preguntar detalles y nombres, en realidad era un chismoso, pero no lo demostraría.

-Es que mira, hay cosas que no sabes porque faltas mucho.- dijo uno de ellos, su cabello era de un color café oscuro, casi llegando a negro.

-No, Taehyung,- dijo el otro, era un poco más alto. -yo sé lo que te estoy diciendo, es uno del salón de al lado.

Y Yoongi, que ya estaba a un paso de salir de ahí, no pudo evitar sentir intriga, mucha intriga, el espíritu del chisme se apoderaba de él.

Se habría visto como un completo chismoso de no ser porque uno de ellos lo sujetó del hombro, teniendo su atención.

-Oye, tú que eres del salón de al lado, ¿de casualidad conoces alguien que...?- guardó silencio unos segundos, dejando la pregunta a medias. -olvídalo, gracias.

Se fueron del lugar y Yoongi no pudo sentirse más nervioso, ¿acaso ellos sabían? ¿Le dirían? Había una posibilidad, una muy enorme.
Debía apresurarse a llegar a su salón para contarle a sus amigos, tenían que saberlo y decirle si eran sólo ideas suyas.

Sí o sí tenía que pasar por ESA aula para llegar a la suya, no tenía de otra, así que sin más intentó calmarse y pasar con normalidad. Sintió una mirada posarse en él, pero siguió caminando como si su vida, o bueno, su dignidad dependiera de ello.

Cuando entró a su salón correspondiente de inmediato fue a su lugar, tenía libre esa hora así que se apresuró a contarles.

-Oigan...

-Ya lo sabemos, acabamos de verlo todo, escuchamos todo.- interrumpió Jungkook, una pequeña risa se le escapó. Y es que se les había hecho fácil escuchar y ver lo que pasó porque de alguna forma esperaban ver si se orinaba o alcanzaba a llegar, así que lo habían seguido.

-Deja que la criatura hable.- regañó Hoseok con cierto enojo fingido.

-Bueno, pues ustedes ya lo vieron, ¿qué debo hacer? ¿Y si ya saben? ¿Y si me humilla frente a todos? Si eso pasa me terminaré cambiando de escuela.- dijo Yoongi, los otros sólo lo miraban con tristeza, sabían lo que había pasado años atrás.

-Yoongi, sabemos lo que sientes, tranquilo, que pase lo que tenga que pasar, si se pasa contigo yo le doy unos...

-Lo que queremos decir- interrumpió ésta vez Hoseok. -es que lo que sucedió en el pasado ahí se queda, entendemos cómo te sientes, pero si te sigues atormentado con eso te quedarás ahí estancado. Dejemos que fluya con normalidad, y si llega a hacer algo fuera de lugar no dudes que obtendrá su merecido.

Ambos le dedicaron una de sus más sinceras sonrisas, no supo en qué momento ya estaba llorando abrazado de sus amigos.

-Chicos...

-Ahora no, Jungkook.

-Es que...

-Guarda silencio, por favor no arruines este bonito momento.

-No, así no, Yoongi, tiene que salir del fondo de tu corazón

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-No, así no, Yoongi, tiene que salir del fondo de tu corazón.- decía Hoseok.

Los tres habían sido mandados por reportes, porque según la profesora que había llegado, estaban haciendo obscenidades en la parte de atrás, cosa que, bueno, en parte parecía, pero todo fue un mal entendido, tampoco la harían entender, así que ahí estaban, claramente no regresaron al aula y estaban en problemas pero eso quedaba en segundo plano ahora. Decidieron irse hacia donde estaba la sombra de los árboles y ayudar a Yoongi con un lindo poema, poema que simplemente terminaban de arreglar.

-Es que, ¿qué quieres que le diga?

-Yo qué sé, pero no vas a escribir eso.

-¿Y qué tiene de malo?

-Yoongi, no le vas a decir que cuando lo ves se te para el corazón y también el pito.

Poemas || yoonminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora