☀☀EL REINO DEL SOL☀☀

33. TRES

Hollow sabía que la diferencia entre él y los ricos que lo habían pisoteado eran sus valores y la justicia que anteponía a todo, aún así entendía la posición de sus hermanos y ya no los culpaba, deseaba reencontrarse con ellos cuando hubiera llevado a cabo su cometido y entonces poder  volver a ser una familia.

Después de llamar a los guardias Luka los contemplaba desafiante, en su ojo ya no había amor solo un oscuro odio los miraba.

Ella enseguida supo lo que aquello significaba, debían huir.

Casi sin pensárselo la chica comenzó a correr, más tarde reaccionó Galia que no estaba acostumbrado a ser un fugitivo aunque si a escapar,  Hollow permanecía inmóvil mirando a la persona que una vez había sido su hermano, no podía creérselo, aquello era traición.

Sabía perfectamente lo que el rey les iba a hacer si los encontraba ¿ Y aún así los había delatado? ¿ No sentía ningún miedo al pensar que su hermano podía morir? ¿ Ya no eran familia?

Para Luka los actos egoístas de Hollow no estaban tan lejos de lo que él acababa de hacer pues ambos ponían en peligro al otro sin embargo para el pelinegro no había justificación alguna, en ese momento sintió como un acantilado los separa a pesar de estar a tan solo unos metros.

Galia se dio cuenta de que su compañero no se había movido y retrocedió, lo agarro con fuerza y casi arrastras logró llevárselo, el chico le caía mal pero aún así eran un equipo ¿No?

: ¡Por aquí guardias!- gritaba Luka mientras los seguía de cerca- ¡ Se fueron por aquí!

Los tres corrían por los pasillos del castillo buscando alguna ventana por la que poder salir, detrás de ellos los soldados del rey no se daban por vencidos.

Cuando Hollow pudo reaccionar se soltó rápidamente del chico rubio, una furia emergía de su interior, no solo había sido vendido por su propia familia si no que también había sido salvado por un inútil como el príncipe, lo detestaba.

:¡ por aquí! - gritó Ella al ver una ventana por la que podían fugarse- ¡ Rápido bajad!

Parecía ser la única centrada, Galia parecía divertirse al sentir la adrenalina de ser perseguido y Hollow, él tenía otras cosas en mente.

La primera en bajar fue la bruja, después el elfo y tercero el ladrón que vio por última vez el rostro amenazador de Luka.

En cuanto bajaron siguieron corriendo, como si no hubiera un mañana, aunque en este caso podía ser cierto.

Se metían entre los árboles del bosque para imposibilitar su captura y el la oscuridad de la noche los cubría como un manto protector, debían ser ágiles ya que los guardias los superaban en número y fuerza si eran capturados no tendrían nada que hacer.

Pronto llegaron al muro que no quedaba muy lejos de palacio, los seguían de cerca y no tenían mucho tiempo.

Buscaron sin cesar pero en el muro no había ninguna cerradura donde meter la llave, ni una ranura, ni un agujero, estaban perdidos.

Sin tener un plan preparado más que su gran afán de vivir Ella presionó la llave en la rígida pared y deseo con todas sus fuerzas que los muros se abrieran.

Estos al momento comenzaron a desaparecer entre fuertes ruidos, crujidos y polvo, ninguno de los tres se lo pensó dos veces y cruzaron al otro lado.

Los soldados ya habían llegado pero las órdenes estrictas del rey decían que nunca, nunca debían salir del reino así que solo pudieron ver como los  criminales escapaban en la maleza de lo desconocido.

Pocos segundos después el mismo estruendo  se dio a conocer para avisar que los muros se estaban cerrando y entonces un silencio profundo apareció, eran sus primeros pasos en el bosque de las bestias, allí no había nadie excepto su propia  presencia.

: ¡ Lo hemos conseguido! ¡ Estamos fuera!- clamó emocionado Galia- ¡ Estamos en el bosque de las bes-

Antes de que pudiera terminar Ella le tapo la boca con fuerza.

:Shhhhh- le replicó- cállate o nos encontrarán.

: Los soldados o... alguna bestia del bosque- susurró Hollow.

Entonces el joven príncipe entendió que ahora estaba desprotegido, solo e indefenso pero libre, a pesar de que cualquier sonido podía sobresaltarlo le gustaba sentir aquello llamado libertad.