Los pasillos del gran palacio estaban desiertos, el único sonido que se escuchaba era el sonido del viento que entraba por las ventanas en los costados.
De un momento a otro se escucharon pasos en el suelo de madera, eran pisadas fuertes y firmes. Un hombre alto con cabello negro como la tinta que caia como una cascada negra por su espada, un ojo obsidiana mirando al frente firme y seguro, con otro ojo cubierto por un parche negro vestido con túnicas rojas como el arce se balanceaban con el caminar, tintineo de joyería plateada brillante reemplazar el sonido del viento una melodía bastante agradable provocando leves destellos por la luz de la luna ¿Quien mas podria ser? Si no el gobernante del reino. El Rey Hua.
El rey regresaba a sus aposentos después de un largo día de idas y vueltas con los Guoshis,consejeros, políticos y miembros de la corte.
Estaba muy cansado, no soportaba escuchar sus sermones de cómo llevaba el reino según ellos parecía un niño jugando pero obviamente los ignoraba y aquellos que lo hacían irritar a los extremos los mandaba a que recibieron un castigo, los despojó de sus puestos y los echaba a la calle como basuras.
Desde que había asesinado a su hermano Jun Wu para tomar el trono se había ganado una reputación de despiadado entre los reyes y la corte. Aunque eso poco le importaba todo lo contrario le gustaba que se conociera como era, para que así no se atrevieran a meterse con el.
Pero apesar de esos horribles rumores, los ciudadanos lo amaban ya que habia traido paz después del horrible gobierno de su hermano que causo pobreza, miseria, esclavitud y injusticia en el reino. Hubo millones de desgracias durante un año que gobernó...
Sin darse cuenta había llegado a la puerta de su habitación real, soltó un suspiro de alivio al saber que por fin descansaría ...
Abrió la puerta y entró sobándose la nuca.
Cuando levantó la mirada vio que su habitación estaba iluminada solo con algunas velas que estaban al lado de su sedán rojo con cortinas rojas que tenían patrones de flores bordadas con hilos de oro, el resto era iluminado por la luz de la luna que entraban por la gran ventana que llevaba a un pequeño balcón.
Vio que había una silueta sentada en el sedán dándole la espalda.
Una figura delgada y hermosa de un joven vestia una tunica roja con exquisitos bordados de flores en la parte inferior, en la parte superior había bordados de flores plateadas; la túnica caía por sus hombros dejando al descubierto estos y su piel exquisita blanca y suave a simple vista, ha tenido oportunidad de tocarla y es la textura más exquisita que a sentido en su vida.
Su cabello castaño caia como cascada por su espalda cubriendo un poco su espalda descubierta, tambien habia un moño en la parte trasera de su cabeza, adornaba toda su cabeza bellos adornos hechos de plata y oro de color rojo. Lo más resaltante era un hermoso broche en forma de flor que estaba en un costado de su cabeza que había mandado hacer exclusivamente para la bella criatura que lo esperaba en la cama.
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Concubina Xie - HuaLian
FanfictionEn un gran palacio rojo un rey custodia y adora a su tesoro. No es una joya de oro o diamante, no es un libro antiguo, no es algún artefactos que puede darte poderes, no es la corona que te le da poder sobre las tierras que reina. No. Es su bella co...