Capítulo 11: "Agust y J hope."

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Agust d abrió sus ojos, dándose cuenta que ahora en lugar de despertar en su calabozos, despertó en su trono, desorientado miro a los lado, sonrió al ver a el chico lindo sentado y dormido, en el trono de Namjoon, con su misma sonrisa, se puso de pie, y se acercó a hoseok, con intenciones de despertarlo.

— ¡Hey! Hoseok, despierta.

...

J hope abrió los ojos, pegando un brinco, al sentir la mano de agust moverlo con levedad.

— ¿Que pasa?. — pregunto aún adormilado, frotando sus ojos.

— Volvemos a vernos. — al escuchar aquella voz profunda, su corazón empezó a latir con fuerza, por la emoción de volver a ver aquél rubio. Hoseok se puso de pié, y abrazo al rubio, tomándolo por sorpresa.

— ¡Agust, te extrañé!.

— Yo también.

Respondió con un tono bajo, algo que volvió loco a hoseok internamente, las manos de agust pararon en la cintura de hoseok, provocando que el castaño se sonrojara, y escondiera su rostro en el cuello de Agust.

— Ya quería volver a verte.

— Igual yo, extrañaba tanto tú linda presencia.

Mencionó, mientras se alejaba del abrazo que tenían.

...

— Igual yo, sabes mis amigos investigaron un poco de ti y si exististe en mi realidad pero años atrás, y que por eso no puedes ser mi alma gemela por que ya estas muerto, bueno en mi realidad.

HoSeok cruzó sus brazos pensativo, Agust miraba a Hoseok con un leve sonrojo, algo que no creía que se notara, aquel sonrojo era gracias a sus pensamientos, aquellos de imaginarse con hoseok en un futuro.

— Pues mis amigos me dijeron que tal vez tu eres mi alma gemela que me esta buscando para que en nuestra siguiente vida estemos juntos.

Hoseok miro a otro lado, ahora siendo él, el sonrojado.

— ¿Tú crees que yo sea tú alma gemela?.

Agust llevo sus manos al rostro de hoseok, obligándolo a qué se miraran, dejando ver aquellas mejillas enrojecidas.

— Claro que me encantaría que fueras mi alma gemela, eres tan bonito y especial.

— Agust, se que llevamos muy pero muy poco conociendonos, y se que nuestro amor puede ser algo complicado ya que somos de distintos tiempos pero quiero que tú seas el dueño de mi vida, de mi alma, de mi ser, de mi todo.

— Creeme que sera así, tú y yo podremos estar juntos en nuestra siguiente vida y en las que siguen.

Ambos se acercaron, y se abrazaron, para después cerrar aquella confesión con un beso, un beso que demostraba y dejaba sentir todo aquél amor, deseo, lujuria y pasión que sentían.

— Quiero aprovechar el tiempo que este aquí contigo, quiero conocerte mejor, quiero saber todo de ti.

Mencionó hoseok, entre sus labios, provocando unas leves cosquillas en los labios de ambos.

— También me encantaría conocerte más... — ambos se sentaron en el piso, quedando frente a frente, sin dejar de tomarse las manos.— ¿Que quieres saber de mi?.

— Primero que nada, ¿que te sucedió en tu ojo, por que tienes esa gran cicatriz?.

— Es que entre mi hermano, el Príncipe heredero, tuvimos una pequeña pelea por ver quien sería el primero en reinar daegu cuando yo tenía veinte y el diecinueve, y al momento de pelear me corto la cara con una espada la cual ahora es mi favorita.

Confesó el rubio con una sonrisa.

— ¿Cuántos años tienes?.

— Tengo veintiocho años, dentro de cuatro meses cumplo mis veintinueve.

El rubio miro con detalle las manos de hoseok, mirando aquella piel delicada.

— Pues, yo tengo veintisiete años.

— Me parece perfecto.

El rubio sonrió, al notar ahora más sonrojado a hoseok, quién trataba de no hacer contacto visual con Agust d.

— Agust, ¿Puedo hacerte una propuesta?. — pregunto hoseok con algo de timidez, ahora sí, haciendo contacto visual con Agust.

— Claro que sí, mi chico lindo.

el rubio asintió, esperando aquella propuesta, mientras miraba con atención a Hoseok, quién parecía buscar las palabras adecuadas.

— Deberíamos de ser novios.

Soltó con timidez, robándose la mirada confusa de Agust.

— ¿Novios? ¿Que es eso?.

Hoseok sonrió al ver la expresión de agust, algo que le pareció muy tierno.

— Los novios, son parejas, es un antes de esposos... deberíamos de volvernos pareja.

— En daegu, bueno en mi realidad no existen los ¿Novios?, cuando conoces a esa persona y estas seguro que quieres compartir tú vida con el o ella deben de casarse... Y volverse esposos.

— Pues hay que casarnos, y seamos felices en nuestros sueños mientras esperamos a ir a nuestra siguiente vida, soñemos con nuestra felicidad.

— Entonces hay que casarnos y ser felices, sólo tú y yo, en nuestra realidad deseada hoseok.

Agust asintió, abrazando a Hoseok, ambos estando en acuerdo con aquella propuesta, ser pareja, esposos, ¿Novios?.

— Tenemos tiempo para conocernos, podemos ser felices.

Sin pensarlo dos veces, hoseok le robó un beso a los labios rojizos de Agust, algo que hizo latir el corazón de ambos.

Hoseok se sentía en las nubes, besando los besos de Agust, si en su realidad no podía ser feliz, por qué no serlo en sus sueños, y con aquél chico, aún que se pudieran ver o escuchar completamente ilógico he irreal, le encantaba pasar el tiempo con él, sea parte de su imaginación, tienen mucho tiempo para conocerce y saber cosas de ambos, hay muchas noches las cuales pueden pasar tiempo juntos, ya sea por sus sueños.

Se separaron de su beso y se miraron a los ojos mientras hoseok se encargaba de ir acostando a Agust en el piso y se sentaba en su abdomen.

— Hay algo que me preocupa sobre esto. — mencionó agust, mirando a Hoseok, quién parecía completamente entretenido con el cuerpo del rubio.

— ¿Que sucede mi chico sexy?.

Por sin dejar de mirar las manos traviesas de hoseok, quién empezaba a acariciar el abdomen de Agust, provocando que el mayor se estremeciera.

— ¿Que pasa si después de esto ya no te vuelvo soñar, y me olvido de todo esto?.

— Tranquilo mi chico, si eso pasa ten por seguro que yo te tratare de buscar, recuerda que tú eres mi alma gemela, mi amor infinito, no dejaría que nada ni nadie nos separe, si en tú realidad estoy muerto ten por seguro que me covertire en tú ángel protector, y te cuidaré hasta que podamos estar juntos en nuestra siguiente vida...

...



























 𝐌𝐈 𝐒𝐄𝐗𝐘 𝐏𝐎𝐒𝐄𝐒𝐈𝐎́𝐍 {-SOPE-} (*Reescribiendo*)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora