el dolor de la Despedida;; Vhope

un pensamiento fugaz

Jung.

Era de madrugada, ¿Que hacía despierto a esa hora? Fácil, estaba pensando en el chico del salón de enfrente del suyo.. un chico de cabello castaño y medianamente largo, un chico alto, extremadamente educado, gentil, amable y bello.

Hoseok sabía esto ya que en contadas ocasiones pudieron interactuar pero no hablar como tal, por ejemplo; en cafetería se cruzaron dos veces las cuales ese chico de saludo con una bella sonrisa.

"Si fuera cierta la leyenda del hilo rojo seguro estaríamos conectados.." pensó Jung recargado en su escritorio viendo su meñique de la mano izquierda.

Estaba por pensar más en aquel chico sino fuera por los sonidos de pisadas que retumbaban por el pasillo oscuro quedaba afuera de su pequeña habitación, rápidamente se levantó de su silla para cerrar la ventana y cuando ya estaba por meterse en la cama se abrió la puerta de roble.

¿Seguías despierto hijo? - comento su mamá quien se encontraba en el marco de su puerta-

No madre estaba por levantarme para ir al baño, ¿Usted estaba haciendo algo? - dije mientras paraba y mejoraba mi postura para mirarle a la cara-

Si, tu mascota estaba haciendo un poco de ruido y fuí a ver cómo estaba - sonrió cuando noto que Mickey el cachorro se colo en la habitación para tratar de subirse a la cama-

Parece que quería venir acá - acaricié a Mickey-

Supongo que sí - soltó una pequeña sonrisa- bien te dejo, no te duermas tarde - mencionó para retirarse cerrando la puerta con suavidad-

Puff - suspiré mientras veía a Mickey- iré un poco para que no sospeche y vuelvo, ¿Si? - hablé en susurros y salí de la habitación mía -

El pasillo seguía iluminado gracias a mi madre quien recién había salido de su cuarto, me dispuse a caminar hacia el baño y cuando entre me lavé un poco la cara, cuando iba de regreso a mi habitación pensaba en aquel chico.

Llegué al cuarto y directamente fui a mi cama cuidando de no lastimar a Mickey quien parecía cansado y cuando estaba ya arropado solo quedaba cerrar los ojos esperando el nuevo día.