The Broken Booster Gear (Hiatus)

Capítulo 18: Amor loco, el comienzo

Mientras Issei e Isaías continúan hablando, el resto del grupo los observa gracias a las cámaras que rodean todo el lugar. Se suponía que esta era una conversación privada, pero la curiosidad ganó el respeto.

"El famoso dragón galés está aconsejando a un niño sobre por qué la venganza es solo un placer temporal. No puedo creer la mayoría de las cosas que habían estado sucediendo desde que apareció. ¿Es realmente el Dragón Galés?" Preguntó Okita.

"Ha cambiado mucho desde entonces. Puede tener algo que ver con sus experiencias con otros anfitriones de equipos de refuerzo e Issei. Si fuera el mismo dragón galés que luchó y mató a cualquier cosa que se le opusiera antes de que comenzara la era de los humanos, habríamos estado en muchos problemas cuando escapó del equipo impulsado". Raynare toca su hombro izquierdo mientras los recuerdos de ese momento llegan corriendo.

Las llamas, la sangre, los cuerpos cayendo del cielo. Una verdadera guerra que ninguna guerra humana podría igualar. Una guerra de dioses y mitologías.

Asia mira al ángel caído. "¿Luchaste contra él en ese entonces?"

Raynare sacude la cabeza. "Eso no fue una pelea, apenas sobreviví. Cuando la guerra entre facciones tuvo lugar y los dos dragones celestiales se unieron a la lucha, todas las demás facciones tuvieron que reenfocar sus esfuerzos para derribarlos. Luché junto a varios de mis ángeles caídos y observé cómo muchos de ellos fueron asesinados por los dos dragones. Ddraig y Albion eran bestias a las que no les importaba nada excepto su rivalidad. No les importaban las facciones ni las ideologías, luchaban contra cualquier cosa que se atreviera a desafiarlos. Dioses, ángeles caídos, ángeles, demonios y otros seres mitológicos sintieron que la lucha contra ellos continuó hasta que fueron derribados. La guerra fue mala desde el principio, pero una vez que Ddraig y Albion se unieron, comenzamos a ir cuesta abajo a partir de entonces".

"Ni siquiera yo podía oponerme a su fuerza. Entre todos los ángeles y creaciones del padre, nosotros los serafines somos los más fuertes e incluso entonces, estábamos lejos de estar al mismo nivel que los dragones celestiales". Dijo Rael. "El hecho de que no parezca guardar rencor contra ninguno de nosotros después de ganar un nuevo cuerpo es una prueba de que ya no es ese joven dragón o eso es lo que quiero creer".

"¿Dirías que era lo mismo que Trihexa?" Okita pregunta.

Rael y Raynare se crispan ante la mención de la bestia de 666.

"Eso ... Trihexa es una lata completamente diferente de gusanos. Ddraig y Albion mataron dioses, pero Trihexa es la razón principal por la que muchos panteones llegaron a su fin. Matamos a Ddraig una vez, pero nadie pudo matar a Trihexa. Ese ser está fuera de nuestro reino y ni siquiera el Dios de la Biblia fue capaz de enfrentarlo". Raynare admite que su cuerpo tiembla de miedo. "Solo Great Red y Ophis podrían compararse con él. Dudo que alguno de ellos ayude en una lucha contra Trihexa".

Las chicas más jóvenes miran al ángel y al ángel caído con curiosidad. Habían leído sobre la bestia, pero nada podía describir claramente lo que era Trihexa o lo poderosa que era.

"Padre lo selló y rezo para que nadie vuelva a encontrar a esa bestia. No podemos enfrentarnos a ese monstruo nunca más y dudo que el Dragón Galés sea suficiente para derrotarlo". Rael toca su mano derecha y el dolor que tuvo que soportar en ese entonces vuelve a ella.

Kuroka mira a los dos y luego habla. "Ustedes dos realmente habían visto algunas cosas indescriptibles. Tiene sentido por qué la alianza fue tan abiertamente aceptada por las tres facciones".

Rael asiente. "Nosotros, que sobrevivimos a la guerra, nunca más deberíamos intentar comenzar algo así. Los errores del pasado deben ser recordados y no volver a cometerse. El Padre ya no está aquí y debemos adaptarnos para asegurarnos de que el cielo continúe prosperando, incluso si eso significa dejar atrás algunas de sus ideas. Podemos ser mejores que nuestro yo pasado".