Run To You - JAEYONG

To...

TaeYong sintió seguridad al dejarse conocer, y se sintió más calmado cuando el hombre frente a él sonrió.

A continuación, Johnny soltó una carcajada que era muy diferente a las que su esposo, esta si era real. Por esto sintió la necesidad de abrazar al hombre frente suyo. El más bajo sintió por primera vez en esos cinco años un sentimiento diferente al deseo de una sola noche, sintió un toque más delicado que cuando su esposo lo tocaba en la cama, esta vez sintió algo más cálido que la indiferencia de JaeHyun. Sintió que el hombre se separaba lentamente, TaeYong se desesperó, sujetándose de los fornidos brazos, no quería separarse, no cuando sentía calidez en ese cuerpo.

-Tranquilo pequeño ángel, no me alejarte de ti-

Con estas palabras el corazón de TaeYong latió con fuerza, ¿Hace cuanto no escuchaba esas palabras? Oh... era verdad, nunca las había escuchado hasta ahora. Ahora cuando se sentía alguien importante, aunque sea por una noche.

TaeYong pasó horas pegado a Johnny, mientras bailaban, mientras ambos bebían y el menor le contaba su historia. Johnny escuchó atentamente las palabras del menor, comprobando que era alguien que sufría mucho, por como relataba su historia al lado de un hombre que no amaba.

-No debes preocuparte hermoso, puedes quedarte conmigo mientras encuentras un lugar donde vivir-

El más bajo supo que esa noche dejaría de ser desdichado, podía ver sinceridad en los ojos del hombre... ¿Era posible? Al parecer si lo era, podia sentir un tipo de aprecio más cálido que el de sus propios padres. TaeYong no se preocupó de cómo acabaría esa noche, ni las siguientes, no cuando estaba seguro que ahora podría empezar de nuevo.

La noche culminó cuando Johnny lo llevó en pose nupcial hasta su auto. TaeYong estaba cansado, y Johnny estaba dispuesto a cuidarlo todo el tempo que pudiera. Al parecer esa noche el mas bajo tenía más suerte que en toda su vida junta, todo apuntaba a un destino donde, podría ser más feliz.

(...)

El tiempo entre ambos pasó lentamente pero, eso solo favorecía a la relación de ambos. Luego de algunos días TaeYong se sentía listo para confesarle a aquel hombre tan amable, una verdad suya, esta era tan grande que no quería que nadie se enterara. Aún con eso TaeYong había desarrollado una extraña confianza prematura en el hombre de tez morena que cuidó de él durante esa semana, y además quien nunca había demostrado dobles intenciones durante sus abrazos casuales.

-Será esta noche- Se convenció a si mismo, mientras aún se arreglaba- Estoy seguro que entenderá-

Terminó por observarse en el espejo unos minutos más, asegurándose de que su presencia sea lo suficientemente llamativa. Después de todo, las personas ya empezaban a hablar del chico que había conquistado el corazón del dueño del antro. Sí, TaeYong era aquel chico, y no podía sentirse más importante.

Johnny resultó ser dueño de aquel lugar, donde por azares de la vida había asistido, sin saber que allí podría encontrar una segunda oportunidad para el amor. Johnny, aquel hombre tan atractivo y caballero era dueño de ese reconocido bar, tal vez por eso recordaba haberlo visto antes. Siendo TaeYong de una familia adinerada, pudo haber reconocido al dueño de ese importante local.

TaeYong suspiró una última vez y salió de la habitación, allí lo esperaba Johnny con una ropa casual, aunque para el mas bajo cualquier ropa se veía bien en el mas alto. Hubiera deseado conocerlo antes, para que el día de hoy ambos se encuentren casados y con una vida por delante. El pensamiento pareció despertar en el una vergüenza nunca percibida, el más bajo se sonrojo hasta las orejas, pero aún así no dejaba de sonreír hacia el hombre.