Cómo Proteger Al Hermano Mayor De La Protagonista
| QUIERO VIVIR! y si la unica forma es convertirme en un MONSTRUO, LO HARÉ..! |
|Tienes razón cuando dijistes que yo no era así, cambie... Para sobrevivir a este lugar, ahora APARTATE DE MI CAMINO...
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Esta era la primera vez que Ada estaba verdaderamente molesta por alguien y lo demostraba abiertamente a otros.
Lo que veía era a un mocoso de la misma edad que su hermano rubio, el mocoso estaba golpeando a Asil mientras le tiraba insultos, el cobarde estaba usando una espada de madera mientras Asil se dependía con los brazos.
Ada sentía que algo cambiaba poco a poco en ella, el enojo cego completamente su mente, dirigida por el enojo se acercó velosmente al contrincante de su hermano.
- ¿¡QUE MIERDA CREES QUE HACES?! -se abalanzó contra el mocoso, sorprendentemente agarro sus brazos doblandolos hacia atrás mientras ponía un pie en la espada de niño-
Del pequeño solo sele podía entender unos sonidos de dolor.
Asil sorprendido por tal escena había caído hacia atrás, cayendo de trasero hacia el suelo, un debate en detenerla o no entaba por su cabeza.
En cambio el chico que la estuvo siguiendo desde ya hace un tiempo la miraba fijamente, contemplando la escena la cual adoraba por aquella mirada en los ojos de su hermana.
Miles de pensamientos sádicos pasaron por su mente retorcida, cada escena mas atroz que la anterior.
Que haces cuando tu mente esta bloqueada por la ira?.
- Esa mujer te volvio a castigar? -pregunto su hermano Azael quien seguía en cama resposando mientras veía a su hermana con la cabeza agachado- Ada?..
La pequeña negó moviendo su cabeza de lado a lado sin mirarlo a los ojos,la vergüenza la carcomia, en serio merece ser la hermana de ese ángel?
- Ada porfavor mirame -pidió, siendo negado nuevamente- Ada... Porfavor...
De poco a poco subió la cabeza hasta toparse con los ojos oscuros pero tan vivos de vida de Azael.
Una pequeña lagrima salio de sus ojos, mientras otra caía seguida de otra hasta hacer nula su vista.
- Yo.. yo.. Lo-losiento -sollozo entrecortadamente, intento limpiarse las lagrimas pero incluso si las limpiaba no dejaban de caer.
Azael la miraba con tristeza, no porque haya golpeado a alguien, sino porque odiaba ver a su hermana llorar, ante sus ojos siempre a sido una niña con una sonrisa de felicidad y bondad, ver que se desmorona es lo que le duele.
- Ada no tienes porque disculparte, no estoy enojado contigo, que cambies no me molesta, has lo que tengas que hacer para sobrevivir en este lugar -calmo a la joven, quien solo asentía repetidas veces-