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Tony saltó de los brazos de Jarvis a los de su papá, quien enseguida llenó de pequeños besos toda su tierna cara, sacándole risas tímidas al menor.

- ¿Cómo te fue hoy, cachorro?

-Bien... -Tony mostró sus dientes en una mueca inocente, señal que nada estaba bien.

-¿Qué hiciste?

- Bueno, puede que Loki y yo pusiéramos chicle en el cabello de una niña del salón de


Stiff.

- No sé lo que pasó, pero seguramente se lo ganó -Su padre contestó después de un

momento de silencio. Edwin solo negó.

-Señor, no creo que sea buena idea alabar las travesuras del pequeño.

-¿Por qué no? -Tony frunció el ceño.

-Si, ¿por qué no? -Secundó el mayor.

-Como su padre debería imponer modales, Tony debe aprender que no es bueno causar daño a los demás.

-¡Pero ella empezó!

-Sí ella empezó me parece justo.

Edwin sabía que Howard no decía todo eso para molestarlo o hacerle mal a su único hijo, después de todo, Howard y Tony eran básicamente lo mismo, de ahí su necesidad de


protegerlos, no podían juzgarlo.

-No es correcto.

-Papi - Howard miró a su hijo con duda - ¿Si Jarvis me está enseñando modales eso quiere decir que es mi otro papá?

Una simple e inocente pregunta ocasiono un alboroto en las cabezas de ambos hombres, donde para el pequeño castaño no pasó desapercibido el cambio de color en los rostros de los mayores.

-Yo... -Howard comenzó a tartamudear sin saber que decir -Bueno... En realidad...

Tony nunca admitiría que aquella situación le causaba diversión y gracia.

-¿Por qué hablas así? - Howard prefirió callar -¿Jarvis quieres ser mi otro papá? Así nos puedes abrazar a papi y a mí.
Las orejas del inglés parecían echar humo.

-Bueno... Yo... -Su mirada viajaba por toda la habitación, evitando hacer contacto con el otro hombre. --¿Quién quiere comer hamburguesas?

Ni siquiera les dio tiempo de reaccionar a responder cuando salió apresurado del salón.


Tony aún era un cachorro que no sabía exactamente lo que sucedía, pero no negaría que aquel desliz no le prendió el interruptor de la curiosidad y esa curiosidad solo podía ser saciada por las personas de su entera confianza

-¿Para qué nos reuniste aquí? -Un pequeño pelinegro flotaba sobre su enorme patito de


hule por la piscina.

-Hay algo raro con mi papá y Jarvis.

-¿De qué hablas?

-Hay... -Comenzó a hacer movimientos exagerados con las manitas, intentando en valde


explicar lo que quería expresar - No sé, muchas chispas cuando están juntos, se ponen rojos y se miran por mucho tiempo.

-Están enamorados -Mencionó el chico rubio que ayudaba a Tony a subir a su dona gigante.

-¿Cómo sabes eso Stiff?-Rogers sonrió con ternura acomodando los cabellos del castaño.

-Mis papás son así, y un día pregunté el por qué se comportan así, dijeron que se amaban.


Los enormes ojos color chocolate del pequeño Stark brillaron con esperanza. Su mente trabajando al máximo.


-¿Eso quiere decir, que Jarvis quiere ser mi otro papá?

-No lo sé Tony, el señor Jarvis es un alfa y tu papá un Omega, deben enlazarse primero -Tony miró a su mejor amiga boquiabierto, Pepper siempre le daba la solución a todo.

-¿Y cómo hago que se enlacen? -En su voz se notaba la duda.

-No es tan fácil Tony, primero Jarvis debe cortejar a tu papá -Contestó rápido la niña

ganándose una mala mirada de Steve.

-¿Y cómo sabemos que si están enamorados?, tal vez Steve se equivoca, vi en un programa que los rubios son tontos- dijo Loki sonriendo para si mismo.

-¡Claro que no somos tontos! Le diré a papá - Loki rodó los ojos con lo que el hijo del

esposo de su mamá había dicho.

-Li diri i pipi, cállate Thor, nadie te quiere. -Lo arremedó con su voz infantil.

-Pero Stiff no es tonto -Lo defendió el menor del grupo.

-Como sea, vamos a comprobarlo.

-¿Cómo haremos eso?

Loki le dedicó una sonrisa a Virginia y ella lo entendió todo. Aquello iba a resultar muy mal o muy bien en el mejor de los casos, pero ¿Qué perdían intentándolo?

El hermoso niño castaño corría con los flotadores en sus bracitos pareciendo totalmente


adorables a la vista de los dos hombres que se encontraban vigilando a los niños.

-Mira nada más a este precioso niño, sin duda eres mi mejor creación -Tony sintió como su carita se llenaba de besos -¿No tengo al niño más hermoso del mundo, Jarv?

-Es el mejor, tengo un poco de envidia.

-¡Comparteme papá! -Gritó con emoción.

Los adultos rieron por el comentario del cachorro.

-Están bien, Jarv, tenemos al niño más hermoso del mundo.

Sin poder resistirse, el mayordomo se acercó a ambos castaños, dejando una de sus manos en la espalda baja del Omega mientras su otra mano acomodaba los cabellos mojados del


pequeño, esa sería su familia si tan solo tuviera el valor de tomarla, pero temía tanto que Howard lo alejara de ellos que mejor guardaba sus sentimientos.

-Papi, ¿me das más besitos?


Howard tratando de ignorar el gesto de su mayordomo hizo lo que su hijo le pidió hasta que fue el mismo niño quien lo separó.

-Jarvis, tú también, ya soy de los dos.

El alfa acató la orden, cuando el cachorro reparó en la presencia de sus amigos asintió a su señal e hizo su carita hacia atrás logrando que los adultos que lo mimaban compartieran un casto beso.


El primero en separarse fue Howard, estaba totalmente sonrojado, mientras Jarvis no sabía cómo volver a mirarlo.

-Papá, abajo

El travieso Tony, fingiendo no haber sido autor de tan incómodo accidente, corrió de vuelta con sus amigos con una gran sonrisa.

-Lo siento -se disculpó Edwin -No quería hacerlo.

El Stark mayor sintió eso como un rechazo, así que, volviendo a reponerse, alzó la barbilla.

-Prepara la merienda para los niños.

-Si, señor.

Bajo la atenta mirada de los cachorros, el alfa entró a la enorme casa dejando a Howard con el orgullo herido y el corazón en la mano.

-Entonces no se gustan -Pepper hizo una mueca de tristeza.

-Lo siento, Tiny -Steve abrazó al castañito.

-¡No! -El niño frunció el ceño con enojo e inconformidad -Ellos se aman y no voy a descansar hasta que Jarvis sea mi otro papá.


La determinación en los ojos del castaño alteró a todos menos a Loki. A quien no le importaba ver al mundo arder desde el cómodo inflable en la alberca.

-¿Cómo te ayudo? -Se ganó una sonrisa de Tony.

-Sabía que podía confiar en ti


Loki y Tony se abrazaron listos para iniciar su misión.
El plan "Boda" acababa de iniciar.

El plan de Tony Donde viven las historias. Descúbrelo ahora