Misión cumplida | OS ||Bakutodo||

Único;

⚠️Atención⚠️
•Escenas para +18, si siguen leyendo es bajo su responsabilidad.
•Violación.
•Intento de lenguaje explícito.
•Leer con discreción.

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Su respiración era errática, el polvo en su rostro, su traje roto en ciertas zonas. El sudor hacía que su cabello se pegara a su frente.

Sus manos temblando, por un momento sintió miedo.

Los rehenes los veían con esperanza, el sujeto frente a él tenía una sonrisa que no se borraba. ¿Y cómo no? Si el maldito tenía un quirk parecido al de su antiguo sensei.

Odiaba esto, no tuvieron detalles suficientes sobre aquel villano que había atacado aquel edificio donde vivía la familia y relacionados al presidente.

Está tratando de pelear a puño limpio, pero él está especializado en ataques a distancia, aún no entiende por qué lo mandaron a él y no a otro héroe.

-¡Vamos, héroe!-Comenzó a hablar ese sujeto, sus piernas temblando ante esa voz grave y rasposa.-Se supone que te entregarías sin resistir.-¿Qué?

Y aquello lo distrajo al punto de que el villano pudo noquearlo.

Ahora entendía la razón de que lo hayan enviado.

Sería una simple carnada. Otro rehén más.

-¡Les dije claramente que no lo enviaran!-Un explosivo chico cenizo entró a la sala de reuniones sin permiso.

Estaba furioso, prácticamente aventaron a Shoto como un cualquiera para mantener al villano satisfecho mientras ellos planeaban el verdadero plan de rescate.

-Y nosotros te dijimos que dejaras tu vida privada fuera del trabajo.-Habló un oficial de policía. Aquel que informó lo que había ocurrido.-Que el héroe Shoto sea tu pareja queda fuera del trabajo, niño.

Eso molestó más al cenizo, ya era un adulto. Y ese oficial solo era meses mayor que él.

-Silencio.-Interrumpió Hawks, era mejor apresurarse si Shoto ya estaba con el enemigo.-¿Lograron encontrar la ubicación exacta del enemigo?

-Sí, gracias al héroe Shoto pudimos saber en qué piso se encuentran los rehenes.

Le extendió una tableta en la qué se podía apreciar la estructura del edificio y en el, un punto rojo que es donde se vio por última vez actividad por parte del bicolor.

-¡Mierda, dejó de moverse hace no mucho!-Gritó con cierto enojo el rubio alado.-¡Vámonos ya!

Los gritos ahogados de las mujeres se escuchaban apenas en aquella habitación, los pocos niños que habían eran obligados a esconderse en el pecho de sus madre para evitar ver lo que sucedía. Los hombres como pudieron se pusieron delante de las mujeres tratando de así protegerlas.

El héroe Shoto había sido derrotado, y pronto sería cruelmente violado frente a los rehenes.

El bicolor despertó no hace mucho, se encontró a él mismo con manos y piernas atadas, y un pañuelo en la boca para que no hablará.