FREAKS (Pablo Gavi)

fiesta en la galaxia

"¡Espectacular! ¡Espectacular! ¡Espectacular! ¡Me los meto por el culo! ¡De locos!"; ese era el tono de llamada de Dani con la voz de Ibai para cada vez que le llamaba justo este mismo. Era de los pocos creadores españoles con el que se llevaba de puta madre y a veces, salían de fiesta, aparte de hacer colaboraciones.

Ella descolgó y lo puso en altavoz mientras se colocaba su bikini negro favorito.

- ¡Dan! ¿Al final vas a la juerga? Estoy en el Mercadona, comprando alcohol, por si querías algo.- ella sonrió.

- Pues claro que voy, tete. Píllame algunas botellas de tequila, ginebra y whiskey, ahora te hago bizum.- se subía sus vaqueros claros, anchos y algo rotos.

- Perfecto, el hielo y los refrescos te lo paso yo, que te los debo de la última vez.

- Cierto, moroso.- sonreía mientras preparaba sus cosas en la riñonera.- Si llegas y no me encuentras, ya sabes por donde estaré.

- Patiéndote la cabeza contra el cemento.

- Exacto, aunque tampoco me caigo tanto, ¿eh?- empezó a mirar sus tablas colgadas en la pared, al final se decantaría por la de siempre, negra decorada con llamas azules.

- Eso hay que verlo. Te cuelgo Dan, antes de que Coscu coja más cajas de salitos.- ella sonrió.

- Nos vemos, bro.- colgó y se colocó sus high jordans blancas y negras, también una camisa abierta negra con llamas maranjas. Estaba algo obsesionada con las llamas. No se abrochó sus vaqueros, los dejó abiertos, para que se viera su bikini debajo, sus anchas caderas ya hacían que no se cayesen.

Su cuerpo era curioso, era alta y de hombros anchos, siempre intimidaba a la gente. Sus piernas eran regordetas y su cadera ancha, pero su cintura muy fina. Se había operado sus pechos en su adolescecia, se quitó parte de ellos por problemas severos de espalda y ahora los tenía más normales. Al hacer bastante ejercicio y ser una persona que poco podía aguantar sentada, la grasa que había reinado en la mayor parte de su cuerpo durante su vida, había sido sustituída por músculos. Pero había veces que no se llegaban a notar siquiera, ya que se mantenía relajada. Era alguien bastante fuerte.

Todo el mundo tenía inseguridades y Dani no iba a ser la excepción, pero cuando empezó a superar su depresión, descubrió que poco le importaba cómo se veía. "Mientras mi cuerpo me permita hacer lo que quiera en mi vida, estaré contenta, no me importa verme de una forma u otra", según lo que solía decir. Y así empezó a ser descuidada, pero, a la vez, se le veía bien todo lo q se hacía. Tatuajes, piercings, cortes y peinados, tintes, diferentes estilos de ropa,... Un alma libre en todo caso y cuando la gente empieza a ver que estás feliz con todo, te ves más atractivo.

- ¡Perdón! ¡Perdón! Te lo pagaré...- Rafa se disculpaba con ella. Había quemado con la plancha una camiseta de ésta que había tomado prestada.

- No pasa nada, no me costó mucho, hay miles de camisetas iguales en cualquier tienda.- sonrió de lado. En realidad le jodió un poco, pero un error lo tenía cualquiera.

Dani tenía una gran virtud, nunca se enfadaba, por nada. Aquellas veces que parecía molesta o contestaba borde, eran mal humores pasajeros, por tonterías o incluso de broma. Sólo había una vez que sólo Juanma la vió enfadada de verdad y no quería volver a verla jamás, le cambiaba hasta el color de ojos. Esa vez, casi acaban detenidos en una comisaría de policía, mejor no recordarlo.

- ¿Ya estamos todos o qué?- decía un Jordy impaciente, vestido todo de negro con su techwear y su skate.

- ¡Va! ¡A pasarlo bien el primer día!- gritaba Dani y los demás la seguían con el ánimo por los aires.