One Shots ;; Harry Potter world

12. James Potter

Los jóvenes Gryffindor de sexto año se encontraban en su última clase del día, la cual era Cuidado de las Criaturas Mágicas y esta se había recorrido hasta que cayera la noche debido al tipo de criatura que observarían en esa lección.

El profesor hablaba sin parar sobre las distintas criaturas nocturnas del bosque y que tan increíbles eran, pero James Potter se encontraba extremadamente aburrido por lo que miro hacia su derecha donde se encontraba su novia, quien parecía tener interés por la clase, pero importándole menos la tomo por la muñeca para alejarla de los demás.

-¿A donde me llevas?-  pregunto confundida la joven mientras lo seguía entre los árboles.

-No lo se Amayrani, por ahí- dijo mirándola de reojo con una sonrisa -Esta todo oscuro y nadie nos podrá ver- casi susurro mientras la tomaba por la cintura atrayéndola hacia el.

-La clase era muy aburrida, no se darán cuenta que nos fuimos- concluyó haciendo que ella recargara su espalda en el tronco del árbol.

-No alcance a ver los unicornios James- murmuró soltando una risita.

El no respondió a sus quejas solo se dedicó ha admirar a la joven frente a el. Observaba su rostro como si fuera lo único existente en el mundo pero unos segundos después posó su vista en los carnosos labios de la joven, se sentía tentado ante ella.

Tomó suavemente por el mentón a la joven a la par que acercaba sus rostros, para finalmente unir sus labios en un ansiado beso, al inicio este era tranquilo y amoroso, pero todo eso cambió en el momento en que ambos juntaron sus cuerpos en la desespera de sentirse. Mientras que Amayrani enredaba sus brazos por detrás del cuello del joven, el metió sus manos por debajo de la delgada blusa del uniforme, para comenzar ha acariciar su cintura y espalda baja.

Al ambos separarse por la falta de oxígeno, James le sonrió de forma juguetona y saco sus manos de debajo de su blusa.

-Ves que es más divertido estar aquí- reprochó con su voz más ronca de lo normal mientras comenzaba a repartir besos húmedos sobre el cuello expuesto de joven, causando que esta soltara suspiros bajos y tomara el cabello del contrario en sus manos.

-Un poco, debo admitir- murmuró cuando el joven se separó de ella.

-Da un brinco- ordeno el castaño mientras golpeaba suavemente los glúteos de la joven.

Ella obedeció y enrollo sus piernas alrededor de la cintura de James, mientras que este sujetó sus muslos para recargarla aún más sobre el tronco de aquel árbol.

El castaño con su mano izquierda acariciaba sin una pizca de vergüenza alguna el cuerpo de la joven, la tensión entre ambos escalaba de nivel de forma rápida. James quería llegar más lejos con cada sonido lascivo que la joven soltaba, pero no lo haría.

-No sabes cuánto te amo- admitió el castaño separándose para acomodarla mejor entre sus brazos, ella apretó el agarre de sus piernas juntando nuevamente sus cuerpos.

Amayrani esta vez tomo por las mejillas al joven y atrajo su rostro hacia ella para besarlo de forma  apasionada, ocasionando que las grandes manos del joven apretaran su cintura, ella sonrió al sentir por un momento el control de la situación y apartó de manera burusca al castaño jalando por sus cabellos, este solo le sonrió mientras negaba.

-Eres molesta- se quejo James mientras comenzaba a repartir besos húmedos sobre el expuesto cuello de la joven, ocasionando que su piel se erizara.

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