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La de mechitas rubias se tallo sus ojitos, tratando de que el sueño se fuera, bostezó y miro a los lados en busca de su menor, no la encontró.
Tomo su celular que estaba a un lado de la cama para ver la hora, nueve y cuarenta y tres.
Se sentó a la orilla, poniéndose las pantunflas rosadas con estrellitas moradas.
Salió de la habitación yendo directo a la cocina, donde sabía iba a estar el resto del grupo.
- ¡Hasta que despierta, Unnie! - burló la Maknae con la boca llena de cereal -
- ¡Shin YuNa! No hagas eso. - regañó la mayor dándole un golpe en el hombro, yuna solo se sobó, no era recomendable discutir con Yeji -
- Oigan, ¿Y Chae? - pregunto la recién llegada al no ver a su menor -
- Oh, se fue al súper mercado a comprar quien sabe que cosas. - respondió shin mayor sirviéndose jugo -
- Ya no debe de tardar en llegar. - dijo, está vez Hwang -
Jisu asintió, yendo a la nevera para sacar la leche.
- ¡Llegué! - anunció la peliroja entrando a la cocina con un par de bolsas -
- Uy, ¿Que trajiste? - pregunto shin menor empezando a revisar una de las bolsas -
- Solo cosas que faltaban, entre ellas la leche.
- Por algo no la encontraba. - río choi yendo a la mesa, dándole un besito a su menor antes de tomar la leche - Buenos días atrasados, Ryeonggie.
- Buenos días igualmente, Unnie. - sonrió sacando el resto de las cosas -
- ¡Fresitas! - chillaron ambas Shin, junto a Choi -
- Sip, pero estas son ¡Para mi!, La última vez se las acabaron ustedes y yo no alcancé. - hizo un puchero recordando como hace tres días la menor y sus unnies se acabaron las fresas que había traído -
- Pero, pero.. ¡No es justo! Nosotras también queremos fresas. - pucherio Shin viendo a la menor -
- Eso les pasa por acabarse las fresas de Chae. - burló lia viendo a ambas shin, las cuales tenían un puchero -
- Unnie, a usted tampoco le voy a dar fresas. - dijo poniendo el cereal sobre la nevera -
- ¡Ja! Ah ti tampoco te van a dar. - burló la peli negra -
- ¡Pero, Pero yo soy tu novia! - protestó con un pucherito en sus labios, ella también quería fresitas -
- Una novia que se acabó mis fresas. - le recordó lee -
- Pero, pero!
- ¡Adiós Unnies y YuNa!
Dijo la menor antes de salir de la cocina, dejando a una lia con la palabra en la boca, una castaña y peli negra en protesta porque también querían fresitas y a una YeJi, igual que antes.
