| COMPLETA | ✔️ BILOGÍA: EMISORA. LIBRO 1. [+18]
Alina Campbell admira desde que era una niña al chico más codiciado y deseado por todas: Matthew Henderson.
Un artista famoso que no solo es conocido por su melodiosa voz y su talento para componer c...
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Alina.
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—¿Y...qué fue de ese chico de la vez pasada?
Salí de mi burbuja de aburrimiento ante la pregunta de Mhara.
—¿Q-qué chico?
—¿Acaso tienes memoria corto plazo? —intervino Sayer mientras acomodaba las carteras de dama—, no te hagas, sabes de qué chico preguntamos.
Mire con seriedad a la castaña quién solo me sonrió inocente, Mhara estaba cubriendo cajas con nosotras puesto que Josh llego tarde y la gerente no le permitió la entrada.
Sí, un punto en contra de Josh, su impuntualidad.
—Oh, ese chico —fingí recordar ese día—. Pues, solo salimos ese día, lo restante solo charlamos.
—¿En serio? —pregunto Sayer con "pena".
Asentí.
—Si ese chico no te ha invitado a salir de nuevo, no es la persona correcta, Alina.
Mhara palmeó mi hombro. Bueno, no es que no quiera sino que no puede.
Matthew esta en Miami, dando una excelente presentación en un reconocido festival de música el cual —por el trabajo—, me estaba perdiendo.
—Si, lo sé.
—Cambiando de tema —Sayer se recargo sobre el mostrador de cajas y nos miro a ambas—, ¿recuerdan el chico que les conté ayer?
Oh, sí. Aquí vamos de nuevo. Sayer, Sayer y solo Sayer.
Creo que pasamos el resto del día escuchándola, a Mhara no parecía molestarle, le entretenía el chisme, a mi también pero cada que se idolatraba a sí misma me dejaba de interesar.
Concluimos con nuestro cierre de cajas, por suerte no quede a deber dinero.
Mi trayecto a casa fue de lo mas cotidiano, cada que subía al vagón recordaba a Matthew. Exhale.
—Que buen deseo cumplido —musité recargada contra la puerta del vagón.
Sabía lo que venía a continuación:
Matthew se olvidaría de mi, sencillo.
Convive con cientas de personas en un solo día, hasta ahora solo han pasado cuatro días desde que nos vimos.
Es evidente que después, olvidará responder mis mensajes y pasaré a segundo plano en su vida...o tercero quizá.
Lloré falsa y disimuladamente.
—Fue bueno mientras duro.
Me gire dando la cara a la puerta, me entretuve mirando el paisaje nocturno, con música a un volumen moderado en mis oídos.
Me encontraba escuchando un aleatorio, busque una canción y de ahí me recomendó canciones similares. Agradecía el detalle de Matthew de compartirme su cuenta.
