Todos los días, el Lord Demonio se escapa de su matrimonio

Capítulo 4

Hua Che contuvo la respiración.

Tuvo una premonición— mientras él y Chu Binghuan se encontraran, creando una intersección entre sus vidas, ¡no podría deshacerse de él por el resto de su vida!

En su vida pasada, el encuentro entre Chu Binghuan y Hua Che había sido un accidente.

En aquel entonces, Hua Che acababa de partir hacia la Secta Inmortal Shang Qing. Como no estaba familiarizado con el camino, encontró a dos hermanos para pedirles indicaciones.

Sin embargo, aunque esos dos hermanos parecían jóvenes y débiles eruditos por fuera, en realidad eran gánsteres estafadores. Cuando vieron la apariencia de Hua Che, inmediatamente les surgieron pensamientos inmorales.

Pero Hua Che, gracias a su madre, se mezcló en el barrio rojo durante toda su infancia. Ya había visto a gente de todas las clases sociales, así que naturalmente era capaz de ver a través de los dos hermanos a primera vista.

Hua Che decidió que podría vencer a estos tipos en su propio juego. Acabó estafándoles hasta que los dos anduvieron en círculos, engañándoles con la comida, la bebida y la vivienda, hasta que los dos miembros veteranos del Jianghu* se vieron sumidos en una miseria indescriptible.

(*Ríos y lagos, donde esta la comunidad de artistas marciales en las historias wuxia.)

Finalmente, los dos hermanos se dieron cuenta tarde de que habían sido engañados y estuvieron a punto de usar la fuerza. Pero justo cuando Hua Che se disponía a huir, chocó accidentalmente con los brazos de Chu Binghuan. El otro joven estaba a punto de entrar a la posada.

Un encuentro fortuito; una sola mirada que duró mil años.

Ya que Hua Che no tenía intención de enredarse con Chu Binghuan en esta vida, sería mejor que se escondiera de él.

En cualquier caso, Chu Binghuan adorará a la Secta Inmortal Shang Qing. En el futuro, en el gran camino hacia el cielo, cada uno caminará por su lado.

Hua Che contuvo la respiración y restringió su aura. En silencio rezó en su corazón 'vete, vete, vete, vete, vete'.

Finalmente, Chu Binghuan se alejó en la distancia.

Sólo después de asegurarse de que no regresaría repentinamente, Hua Che liberó al adolescente con confianza.

Al estar sofocado durante tanto tiempo, la cara del joven estaba extremadamente roja. Tragó grandes bocanadas de aire antes de preguntar: "¿Exactamente quién eres tú ah? ¿Qué clase de cosa vergonzosa has hecho, para esconderte así de Chu Binghuan de Yuntian Shuijing?"

Hua Che puso los ojos en blanco, "¿Tiene algo que ver contigo?"

El adolescente: "Oye, ¿realmente quieres hablarme así? ¿Sabes quién soy? ¿Sabes quién es mi padre?"

Hua Che se encogió de hombros: "No lo sé."　

De forma extremadamente heroica, el adolescente se señaló a sí mismo y dijo: "Yo, Mu Rongsa, soy el Joven Maestro del Valle Feng Ming. ¿Lo sabes ahora?"

Al escuchar esto, Hua Che se sintió un poco sorprendido.

En efecto, había alguien así en el Valle Feng Ming: un joven maestro hedonista con una personalidad extravagante. Era arrogante y dominante, y se apoyaba en su padre para tiranizar a los demás fuera.

Sin embargo, este joven maestro todavía tenía algo de valor y conocimiento. Durante la vida pasada de Hua Che, Mu Rongsa había participado en todas esas situaciones caóticas, y había hecho su parte para exterminar el mal. Mientras tomaba la iniciativa, este joven maestro nunca había retrocedido.