Like I Can [James Potter] (Wattys2022) ✓

35. Un día inesperadamente hermoso

1 de octubre de 1991

Había pasado un mes exactamente desde que los niños volvieron a Hogwarts y ya los estaba extrañando a todos por igual. Pero me alegraba de que estuvieran bien, incluso Harry había conseguido el puesto de buscador y solo estaba en primer año, el orgullo que nos hacían sentir los niños era inexplicable. 

Según nos contó Ron, porque si él también nos escribía cartas, habían conocido a una niña de padres muggles en el tren llamada Hermione Granger, pero ese era otro tema aparte. Según él, se encontraban todos en su primera clase de vuelo y yo unos días antes creo o el mismo día, no lo recuerdo muy bien le había mandado a Neville una Recordadora. Para que al menos cuando la nube se pusiera roja que era cuando olvidaba algo, pues hiciera a Neville de alguna manera recordar lo que se le había olvidado. Pues bueno, estaban en clase de vuelo y eso lo recuerdo muy bien, ya que fuimos corriendo a Hogwarts James y yo cuando nos dijeron lo que le había pasado a Neville y bueno la mitad de la historia la sabíamos por él, pero Ron quiso contar todo. El caso es que accidentalmente Neville comenzó a volar, pero no sabía como bajar así que desde una altura considerable cayó rompiéndose la muñeca. Después de que la profesora se lo llevara, Draco Malfoy, hijo del rubio oxigenado como solían decirle James y Sirius. Agarro la Recordadora de Neville y voló con ella, logrando que mi querido hijo agarrara su escoba y volara hacia él para recuperar la recordadora de Neville. Pero Malfoy al ser hijo de Lucius la tiro lejos haciendo que Harry sin poder evitarlo fuera rápidamente a por ella logrando atraparla y ser visto por MacGonagall.

Así que desde entonces nuestro pequeño jugaba en el equipo con su hermana y su primer partido si mal no recordaba era a principios de noviembre y jugarían contra Slytherin. La verdad es que siempre que tanto Marie como ahora Harry tenían un partido me ponía demasiado nerviosa porque temía por ellos, aunque fueran buenos eso no haría que me tranquilizara si en algún momento alguno de ellos se hiciera daño.

Era demasiado sobreprotectora con todos, incluso con Ron, James, por otro lado, era un sobreprotector con Marie y siempre que iba a Hogwarts se la quedaba pegado a la pobre Marie. A ella no le molestaba eso, pero a mí solo me hacía querer darle un golpe, porque el sí solía comentar cosas si yo hacia lo mismo con Neville, Ron o Harry.

Los niños estaban demasiado bien y por lo que sabía no se habían metido en ningún problema, aunque tal vez no me lo hubieran dicho, pero bueno con tal de que estuvieran bien y no los expulsaran todo perfecto.

—Addie, ¿lista? —levante la mirada del libro que estaba leyendo para ver a James con una rosa en la mano y con una gran sonrisa.

—¿Lista para qué? —James me extendió su mano.

—Es una sorpresa, pero debes confiar en mí —deje el libro aun lado y me levante dándole la mano a James con una pequeña sonrisa.

—¿Qué sorpresa? —James me dio la rosa soltando una pequeña risa.

—Si te lo digo ya no es sorpresa mi hermosa Addie. Sé que odias las sorpresas, pero te prometo que esta te encantara o eso espero —volvió a soltar una pequeña risa. Yo asentí con una sonrisa mientras agarraba la rosa con cuidado y salíamos de casa.

—Seguro que me encanta —James asintió sonriendo mientras subíamos al coche, una vez dentro y listos, James saco de su bolsillo una venda—. James eso sí que no —él asintió divertido.

—Te lo pondrás cariño, porque si no, no será sorpresa y me costó demasiado planearla —suspire y asentí a regañadientes mientras James me ponía con cuidado la venda—. No voy a preguntarte, ya que confió en ti y sé que no estás viendo nada y no harás trampas —asentí y él puso en marcha el coche. En todo el camino estuve pensando en todos los lugares posibles, pero ninguno me convencía, sabía que James cuando hacia las cosas, solía hacerlas demasiado bien.