1:-■Culpable■

330 28 14
                                    


A la sombra de un árbol, sentado sobre una rama, posado como un cuervo con recelo, y callado semejante a un muerto; un individuo fijaba su vista sobre un hogar, en cuyo interior, su antigua esposa tenía su cabeza recostada sobre quien fue su mejor amigo en vida, y con quien tuvo una hija.

Sus ojos estaban opacos, se dilatan aún sin tener pupilas, y sus manos hacen un gesto de contingencia. Quería extender su mano, agarrar algo que estaba tan cerca y tan lejos por igual distancia. Pero no pudo estirarla, no pudo. El valor de hacerlo era pobre; el deseo ingente. Sin embargo, resistía como podía sus deseos. El valor para realizarlo, era menor en medida que sus convicciones y humanidad reticente a abandonar su Alma. Solo miró entremezclado con las sombras en un lugar ausente de brillos, teniendo sus ojos como única parte visible. Enmascarado tras un velo que no era visto por nadie.

-"Mi vida es una mierda"- piensa el espectro mientras se mueve de lado a lado, ahora en otro lugar, entre los grotescos terrenos, las horripilantes esquinas donde se olía el olor a delincuencia y basura; el hedor de la propia humanidad, oculta ent...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

-"Mi vida es una mierda"- piensa el espectro mientras se mueve de lado a lado, ahora en otro lugar, entre los grotescos terrenos, las horripilantes esquinas donde se olía el olor a delincuencia y basura; el hedor de la propia humanidad, oculta entre sus propias creaciones de hormigón-"¿O sería muerte?, no puedo considerar ninguno de los dos lados. Maldita sea mi suerte"- piensa con su capa cubriendo los callejones en un manto carmesí, que con ayuda de la luz debilitada de la luna teñia esos pequeños lugares de un aura mortal. Sin duda, ante tantas cosas malas que había en aquella ciudad, él era la peor.

No hay mucho que decir de su vida desde que resucitó como un heraldo; desde que quedó al igual que un errante en la tierra al igual que Cain. Él era una criatura nacida de uno de los peores demonios. En gran medida, condenado por sí mismo y por sus pecados. Él era Spawn.

Marginado del mundo terrenal, del mundo espiritual y del mundo celestial, no pertenecía a ningún lugar

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Marginado del mundo terrenal, del mundo espiritual y del mundo celestial, no pertenecía a ningún lugar. Pero incluso alguien que no pertenece a ningún lugar, encuentra cobijo en uno, por más que irónico que suene.

Volvía a su actual hogar tras recordar el antiguo. Tras superar la tentación de restaurar su cobijo. Tenía ganas de deshacerse de su máscara y entrar por la puerta de su vieja casa para que le vean su permanencia en tierra y le alaben. No obstante, sabía cuál era su situación actual como para dejarse llevar por su interés.

Spawn contra La máscaraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora