Él ni siquiera pensaba en el amor, pero apareció ella y sus sentimientos explotaron.
A ella tal vez le cueste empezar una relación de nuevo, pero son jóvenes y no hay que desaprovechar las oportunidades de la vida ¿verdad?
¡Historia en proceso!
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NARRA NIKKI;
A la mañana desperté con Steven, mi hermano mayor, gritándome.
— ¡MIERDA NIKKI! Tienes suerte de que mis papás no estén acá, ¿Que mierda haces con 2 chicos en la cama?. —dijo, parado en la puerta.
— Carajo, ¿en serio tienes que gritar?. Pensé que la otra noche habías escuchado que llegue tarde y algo ebria a casa, y son solo amigos, no es como si haya hecho un trío de 5 horas Steven. —le dije al idiota.
— No, pero eres capaz, te conozco mucho. Además no puedes confiar en personas que conociste en un día
— ¿En serio dices eso?, No olvides la vez que me quitaste la conquista y de pasada tuve que escucharte gemir toda una noche, maldito, parecías un chimpancé llorando. —le saqué en cara.
— Bueno, mejor dejo de ser el hermano ejemplar, peros era mejor que arregles esto y vayas diciéndoles que se preparen porque llegarán tarde. —dijo saliendo.
— Mierda, la escuela, que jodido día. —dije para levantarme, pero no pude.
Hunter estaba encima mío, y un Kevin abrazándonos. No se como seguía viva y respirando. Como pude, me levante de ahí, aunque Kevin casi se cae de la cama, pude evitarlo.
Me alisté con unos jeans clásicos negros, camiseta manga larga, camisa manga corta a cuadros, mis hermosas converse y un gorro. No me maquille más que los ojos, y solo peine un poco mi cabello. Preparé el desayuno y fui a despertar a los chicos.
— ¡HEY VAGABUNDOS, HAY ESCUELA HOY! —les grite en el oído.
— MIERDA. —dijo Kevin sobresaltado.
— Por que carajos me gritas en el oído mujer. —habló Hunter.
— Porque llegarás tarde al colegio idiota, así que levántense, ya les dejé ropa, tal vez algunas prendas son de Steven, no quiero prestarles mis preciadas camisetas. —dije saliendo de la habitación.
[...]
Básicamente llegamos manejando rápido a la escuela porque era demasiado tarde, habíamos desayunado en el auto como pudimos.
Al bajar del auto, las personas nos miraban mucho, algunas con miradas coquetas, otras con desprecio y otras solo se reían o observaban con curiosidad entre ratos para volver a conversar con sus amigos.
— Chicos, en un rato los veo, tengo que hacer algo importante. —dijo Hunter.
— Está bien, pero más tarde quiero hablar de algo que escuche de ti ayer. —le dije.
— Bien, ¡nos vemos! —dijo caminando rápidamente hacia dirección.
Al rato una chica muy linda se me acercó, tenía una falda corta, color marrón, un saco, camiseta con el logo de The Beatles y cabello castaño.
