Dreaming of you - Cigarettes after sex.
🫰🏻
Enamorada.
Esa palabra la perseguía sin importar cuánto intentara esconderse, simplemente no podía dejar de pensar en lo que _______ le había dicho. Ella estaba enamorada, siempre lo estuvo.
Laure amaba a _______, lo había hecho desde que tenía memoria, era su mejor amiga, su confidente, su cómplice en sus locuras, la que siempre la dejaba ganar en los videojuegos durante las revanchas. Y luego estaba esa extraña atracción que se había empeñado en ocultar hasta que supo que la pelinegra era homosexual, entonces todas esas situaciones del pasado salieron como lava caliente.
No se arrepentía de nada porque había disfrutado cada segundo con ella, jamás alguien la había besado como la más alta, nunca había necesitado tanto que la acariciaran. Cuando estaba con ella no podía pensar en nada más que en sus manos vagando por su cuerpo.
Recordaba todas esas veces que en vez de dormir se sumergieron en un intercambio de besos, de caricias, de movimientos sensuales que le erizaban los poros, que electrocutaban sus sentidos. Lauren saltó y lanzó la pelota, pero esta rebotó fuera del cuadro y salió volando. No podía concentrarse en el entrenamiento, ya sus compañeras y el entrenador se habían dado cuenta de que algo estaba pasándole.
Escuchó los gemidos de frustración y el silbato de Fitzgerald. No podía distraerse, a esas alturas todas las del equipo debían tener la mente en el juego, si es que querían ganar y sobresalir en los partidos. De otra forma ninguna encontraría una beca decente para ir a la universidad. El equipo dependía de todas y Lauren ton no estaba haciendo un buen trabajo.
Se dirigió a la banca, ignorando las miradas curiosas y de reproche que algunas le mandaban. Estaba agotada, no tenía ganas de jugar, deseaba tirarse en una cama y pensar en lo que sucedía entre ______ y ella; sin embargo, debía entrenar, no había tenido otra opción más que pararse en medio de la cancha y fingir que su mente no estaba en otro lugar; claramente había fallado, pues no había podido encestar ni una jodida vez.
Se limpió el sudor con una toalla, tomó agua de su botella para refrescarse antes de dirigirse a las duchas. Se internó en el área de las duchas, escuchando el alboroto de las chicas a sus espaldas. Se desvistió sin prestar atención, ya que estaba perdido en sus pensamientos y se colocó debajo de una de las regaderas. Reguló el agua y dejó que esta limpiara la suciedad que había provocado el ejercicio.
Estaba pensando en que iría a buscar a su amiga para decirle que terminaría las cosas con Tony, no era como si se sintiera cómoda mintiéndole de todas maneras. Lo que menos quería era lastimar a al chico, se sentía miserable aparentando que había algo entre las dos. Además, sabía que quería a ____*, no podía negarlo y cegarse, tal vez le tomaría tempo adaptarse a esa nueva etapa, hablaría con ella y le pediría ayuda para asimilar las cosas. Sin embargo, una palabra hizo que saliera de la nube en la que estaba, prestó atención a la conversación del resto de las chicas.
-¿Homosexuales? ¿De verdad? -preguntó una lanzando una risotada que fue seguida por un montón de risas burlonas y aullido. La ojiverde se alarmó, creía que estaban hablando de ella, la sangre volvió a circular por sus venas cuando se dio cuenta de que no era la protagonista de la plática.
-Sí-contestó Camila. mi padre me dijo que encontraron a dos chicas de Coyotes en los vestidores teniendo sexo. Llamaron a los padres, toda la escuela lo supo, la sociedad de padres de familia armó un lio hasta que las sacaron del equipo porque no daban un buena imagen.
El padre de Camila Cabello estaba muy metido en la vida estudiantil de su hija, casi rayando la obsesión, Lauren se daba cuenta porque el viejo se involucraba mucho en las actividades de Beacon -sobre todo en las que tenían que ver con los Eagles-, por eso daba dinero una vez al mes para el equipo y se había convertido en uno de los benefactores. El señor Cabello tenía fe en que la chica cumpliría los sueños que él no había tenido la oportunidad de cumplir. En unas semanas ellas se enfrentarían a los Coyotes, iba a ser una buena oportunidad para demostrar las destrezas deportivas que poseían, así que él no perdía tiempo e investigaba a los contrincantes para buscar sus puntos débiles.
-Tal vez todas son lesbianas ahí -la chica que dijo eso hizo una seña obscena con sus dedos índice y medio, metiéndolos en un agujero que formó con su otra mano.
La frente de la ojiverde se arrugó, se desconectó de la conversación, pues no le gustaba lo que estaba escuchando, y miró fijamente los mosaicos que tenía en frente, los contó, siguió las líneas con la mirada para distraerse. Se lavó y masajeó el cabello lo mas rápido que pudo, al igual que el cuerpo, y salió de las duchas apresurada.
Una vez en su casillero juntó su ropa y comenzó a vestirse, por algún motivo sentía la necesidad de alejarse, No quería dar explicaciones ni conversar con las chicas, no obstante, sus deseos se fueron directos al infierno cuando ellas la rodearon. No es que estuvieran sobre Laur, cada una hacia lo suyo mientras la otra percibía el aire pesado.
Suspiró con alivio apenas puso un pie en el exterior, se dirigió al estacionamiento y se montó en su bicicleta tan pronto quitó la cadena de seguridad. Si la hubieran visto, cualquiera habría pensado que estaba escapando, sus movimientos ran bruscos y ansiosos, desesperados.
Llegó a su casa casi media hora después, entró y subió a la segunda planta sin saludar a su madre, lo cual era algo habitual en ella. Se encerró en su alcoba y se tiró al colchón, soltó un suspiro que a acudió de lo más recóndito de su pecho.
Miró el techo, liso y blanco. Cuando eran pequeñas _______ y ella habían lanzado gomitas ensalivadas una vez, y la señora Clara las había puesto a limpiar sin despegarles la vista de encima. Lauren se apretó el puente de la nariz, los ojos comenzaron a picarle, no pudo contener las lágrimas que se precipitaron en su dolida mirada. Quería a su amiga, así como deseaba decírselo, contarle que estaba dispuesta a aceptar sus sentimientos, poco a poco, pero con ella.
Sin embargo, también quería un futuro, ese que siempre había soñado y que perdería si las del equipo se llegaban a enterar. No les importaría perder a una de los mejores jugadoras, de todas formas, se esfumarían en cuestión de segundos todo lo que había conseguido hasta ese momento.
La impotencia y el pánico cundieron, le subieron por la garganta hasta el cerebro. ¿Qué tenía que hacer?, ¿_______ la entendería? ¿Estaría dispuesta a esperarla? Esa y muchas otras cuestiones la atormentaron esa noche, acurrucada en su colchón con lágrimas saliendo como si de un manantial se tratase.
Y la verdad es que Lauren la quería, amaba a _____* porque era un pedazo de su corazón y de su infancia; pero también amaba jugar. No podía compararlos porque ran diferentes, pero al mismo tiempo esenciales para ella.
Sería infeliz sin su mejor amiga, también sin poder jugar a basquetbol, sin poder entrar a la universidad que quería. Si los perdía se recriminaría durante toda la eternidad, ¿por qué no podía tenerlos a ambos?
Lloró, Iloró hasta que los ojos se le secaron.
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La Sintonía de los Colores (Lauren Jauregui y tú)
Fanfic________ y Lauren comparten un montón de secretos. No pueden negar que lo debería ser prohibido sabe como el paraíso. La atracción es real que se siente como chispas luminosas, y el miedo podría amenazar lo más bello que han tenido. Dos amigas, una...