Saturno

C A P Í T U L O I

Conforme atravieso las puertas de embarque me doy cuenta que no puedo mirar atrás, que es real, ¡Estoy tomando la decisión más importante de mi vida! Realmente lo estoy haciendo, un cosquilleo se apodera de mí, talvez era miedo a perder o la incertidumbre de mi propio futuro, no lo sé. pero si estaba segura de algo; que no iba a ver atrás porque atrás significaba volver al pasado.

Al entrar y encontrar mi número me siento cálculo en mi mente las horas de viaje y gracias al cielo no hay Muchas paradas, levanto la mirada y veo una pantalla justo al frente con una muy buena lista de películas de Disney que serán una excelente compañía estás 19 horas, Luego de casi 11 horas de vuelo me sentía agotada y presa de ese dolor; su recuerdo era así: abrumador, intenso — siento como mi garganta se seca y quema, sé que es a causa   de las lágrimas que me niego a derramar.

Perdida en mis recuerdos, no me doy cuenta de los detalles que pasan a mi alrededor como que estoy siendo la atracción de un par de gemelos traviesos dos asientos al frente del mío, o lo hermoso que se ven las formas graciosas de las nubes en el cielo, estoy a punto de reír de esos detalles pequeños pero que causan cierta alegría y me doy cuenta de algo ¡Que no he estado riendo tanto como solía hacerlo, desde todo lo ocurrido esa noche!

Habían pasado 3 semanas de mi llegada a Santiago, las vacaciones habían terminado. Otoño ya casi se estaba despidiendo, estábamos a finales de   junio y la brisa fresca del invierno se comenzaba a sentir.
Faltaban dos horas para terminar microbiología, y solo pensaba en todo lo que tenía que estudiar al llegar a casa, solté un suspiro que creo que se pudo escuchar algo fuerte, toque mi sien, escuché la respiración de alguien muy cerca de mí y seguido de eso el tacto cálido sobre mi hombro.

No fue necesario decir nada, el silencio no era incómodo, las miradas de ambas lo eran todo, ella sabía cómo me sentía y no me juzgaba por ello, aunque era un poco intensa, esta mujer era alguien realmente increíble y con esa palabra me quedo corta para describirla, Gina era mi mejor amiga casi hermanas de otra madre, nos conocíamos desde la infancia o antes creía yo, podríamos decir que en la vida preterenal quizás.

Pienso que todos estamos escribiendo nuestra propia historia y queremos un final feliz   así que Todos necesitamos a buenas personas que nos alienten a lo largo del camino creo que solo así será divertido escribirla y Gina es mi persona.

La clase paso rápido , las bacterias y los antimicrobianos no eran mi fuerte pero era algo que me apasionaba y quién no , si gracias a la automedicación las bacterias son más resistentes que las rocas , antes de irme anote la bibliografía del informe que haríamos al final del semestre  valía  el 30 % de nuestra calificación semestral y empecé a sudar por tanto  estrés , soy la típica chica que le cuesta mucho adaptarse a los cambios , supongo que me lleva tiempo , podríamos decir que soy diferente , me tomo tiempo aceptar que mi esencia no está hecha para ser comprendida por mortales de este mundo  , y está bien así , de esta forma soy feliz.

Alise —¿Me estás escuchando? Dice Gina observándome con el ceño fruncido y agitando su mano derecha frente a mi rostro, suponiendo que con esa acción puede captar mi atención.

Parece molesta.

La observó detenidamente, y veo como se le forma una pequeña arruga en su nariz - Entonces ... — alarga Georgina, viéndome a los ojos ¿Está noche saldremos ok?

Frunzo el ceño.

— Bueno ... Asiento , entrecerrando mis ojos sopesando que será una noche larga , al llegar al departamento subo los escalones de dos en dos  entro a mi habitación que está justo en frente del el de ella  , realmente es un departamento pequeño no es para nada lujoso pero tiene la mejor vista de Santiago se puede observar  como los colores del cielo se unen haciendo el panorama perfecto para los enamorados  cursis  ,creo que eso lo hace especial ; abro la puerta de mi habitación y busco en  el  desastre de closet algo que pueda usar esta noche ,pero no encuentro  nada decente .
— Alise, vendrán por nosotras en 15 minutos ...  ¿Estás lista?
Ehhhhh… aún no lo siento, ahora me cambio, te juro que no tardo nada, abro la puerta de mi habitación haciéndole pasar escojo un vestido negro corto y unos botines, me Recojo el pelo en una coleta alta con unos cuantos rulos cayendo sobre mi frente miro el reloj que marca las 11 menos 10 pm tomo mi bolso y es hora de irnos; estar en Santiago sin un coche y a estas horas no es nada fácil y más si esa persona era yo, siempre pensé que yo traía la mala suerte casi todo el tiempo. Cuándo necesitaba un taxi nunca existían los ingratos para mí, era como si Dios quería que caminara todo el tiempo.

No lo sé.

El lugar está que no cabe un alma, el rocío de la espuma se podría sentir en la piel, la tenue luz hacia que todos se sintieran sin complejos sin perjuicios a ser juzgados, una oscuridad que era muy aprovechada por los amantes empedernidos, almas que declaran falsas palabras de amor que se extinguen al amanecer, perfectos dramas existenciales. Ese tipo de euforia que es efímera pero que es un placer de la vida misma.

Uno de los meseros nos ve y nos dirige a una mesa que está cerca de un grupo de chicos, Ya en la mesa pedimos la primera ronda, observó detenidamente el lugar las paredes eran muy oscuras con trazos de pinturas minimalista, podría culpar al diseñador de crear la excusa perfecta para los infieles supongo que era uno de ellos, Cassie me hace seña con sus manos, salgo de mi trance y la escucho.
—Alice sé que lo que te diré está muy fuera de lugar, pero quiero que lo pases de lo más esta noche y solo pasará si te atreves a intentarlo mira Enarqué mis cejas y la mire fijamente; ella diría algo inteligente y obvio tendría toda mi atención. - Hay tres tipos de personas. Los que hacen que las cosas pasen, los que miran las cosas que pasan y los que se preguntan qué paso.
¿Cuál quieres ser tú está noche?

La mirada austera de Rebeca y Georgina hace que mi estómago de vuelta y respirar se vuelve un tanto complicado, pero necesitaba esto. Necesitaba que me dijera la verdad a la puta cara para darme cuenta que mi vida iba seguir siendo una mierda si no hacía algo para cambiarlo y hoy era ese día.
_ No , no es tan fácil ..! Les grite lo más fuerte que pude hacerlo .

Mis pupilas se dilatan y estoy a punto de llorar,  sentí como me estaba perdiendo de nuevo , y no quiero hacerlo , solo de pensarlo siento como me estresmezco , si pierdo la cabeza el corazón responde y no quiero que los sentimientos ganen esta guerra ¡ No está vez ! .

Respire y recordé las palabras que algún día mi padre me digo Alice el tiempo no cura, lo que cura es lo que hacemos con ese tiempo , y es ahí en ese justo momento cuando te das cuenta que las cosas solo ocurre una vez y que vivimos de los  fragmentos y partículas de los recuerdos .
Sus palabras resonaron tanto que quemaba literalmente .

Entendí en ese preciso instante que no podría  cambiar lo sucedido, no podría  cambiar lo que hice o lo que me hicieron. Pero podia decidir cómo vivir ahora.