Blue Eyes In The Blue Sea-Larry

Final Alterno Parte III

Canción: You Found Me- The Fray

Mayo 2020

La gente transcurría las calles de Londres como normalmente haría en un día soleado y de calor.

La vía pública olía a una mezcla de crema solar y verano, los niños corrían felices por sus vacaciones mientras Louis y Harry paseaban alrededor de una plaza. Dados de la mano. Felices.

Habían pasado años, y esos años brindaron una mejoría a Louis, y una casa donde solo cabía amor y no había lugar para el anhelo.

A veces los días malos volvían a Louis, y aunque con los años no se pasaba, Harry le intentaba animar en esos días que Louis no podía consigo mismo. Porque todo el mundo tiene días malos, algunos más que otros, pero en realidad lo que importa es que al final de todo sepas estar bien y en paz contigo mismo.

Llegaron a la casa que compartían y Johannah les esperaba con los brazos abiertos, cocinando algo para el mediodía mientras Harry y Louis se cambiaban en su habitación.

–Harry, ¿sabes que? –Preguntó Louis antes de ponerse la camiseta.

–Dime, amor.

–Te amo, Harry. Y no creo que esto que siento ahora mismo sea comparable con nada que haya experimentado otra persona, yo... solo te amo.

Y Harry no pudo evitar pensar que ese era el momento, ahí, semidesnudos.

–Louis... yo creo que no hay momento más ideal que este para esto. – Harry buscó algo entre la ropa tirada en el suelo y se arrodilló delante de Louis con un anillo en mano. –Yo también te amo más de lo que podré amar a alguien o a cualquier cosa de este universo y por eso quiero casarme contigo, Lou. Porque se que te amo, y aún que ya se que tu eres mio y yo soy tuyo, así poder demostrarle al mundo entero cuanto te amo.

Louis no dijo nada, él dejó que su lágrima deslizarse sola por su mejilla, rebuscó algo en su bolsillo trasero y se arrodilló a la misma altura que Harry mientras alzaba en su mano una pequeña caja de terciopelo.

–Hazz... yo también quiero demostrarle al mundo entero que nos amamos.

Rieron porque se amaban, porque eran felices y tenían dicha. Y luego se besaron.

Se besaron como se besaron en la habitación del rizado con el tocadiscos de fondo y gimme shelter. Con ansias de amor y la expectativa de la otra persona. Hicieron el amor como lo hicieron la primera vez, con amor. Y se amaron como se amaban desde el principio de sus vidas.

Eran almas predestinadas, y se habían encontrado y enamorado.

Tal vez, los finales felices sí existen.