A través de mi mirada

D I E C I S É I S

                    Dedicado a Tahizoo

  Golpes bajos, quizás muy bajos

               Billie Eillish - Bored

- No debí haber hecho eso

Me separé bruscamente de el, debo admitirlo. Volví a la ventanilla, observando todo lo que se cruzaba por el camino

Todo el panorama, el césped recién cortado, los jardines y las flores repletas del rocío de la noche, las casas antiguas, con techos de madera o tejas

Las personas caminando con pasos apresurados para llegar al trabajo, la escuela o incluso a una cita. Parejas tomadas de las manos

Personas fumando, bebiendo o tristes vagabundos durmiendo en asientos del parque. ¿Qué es esto?

Animales sin hogar, rogando por comida, madres llorando por no tener dinero para pagar el tratamiento médico, jóvenes trabajando por tal de ahorrar para la universidad

Niños llorando, padres discutiendo, parejas discutiendo, una señora enfadada con el panadero, todo en cámara lenta, en retrospectiva

Es un mundo podrido

Eso es lo que es

- ¿En qué piensas? - preguntó Liam con un tono de de intriga

- En nada - no os pasa que siempre dicen que están pensando en nada cuando en realidad están pensando millones de cosas

- Segura Nicole? - joder que tío más intenso, ojalá tuviera el corazón de Edgar para poder decirle que es insoportable

- Totalmente Liam -  tan segura como que amo a mi padre, jeje

Ok, soy insoportable...

Soy muchas cosas en realidad, excepto falsa, eso no mi ciela

- ¿Cómo puedes ser tan amable con las personas? - cuestioné - siempre estás sonriendo, acaso no te molestas nunca?

En serio tío, pareciera como si no tuvieras más sentimiento que la alegría, es escalofriante

- Claro que me molesto Nicole, pero, como dijo Charles Chaplin, un día sin sonreír es un día perdido - enfatizó lo último, sonrió (clásico) y encendió la radio

Entonces, se escuchó las embriagadora melodías de Counting Stars de One Republic, amaba esa canción. La armonía y tranquilidad que transmitía era única en este mundo. Simplemente una obra de arte

- ¿Te gusta? - interrogó haciendo referencia a la canción, podía escuchar como el la tarareaba por lo bajito

- Más que eso, me encanta - dije, creo que con demasiado entusiasmo, si, me excedí, parecía una fan de Justin Bieber en su concierto

- Ya tenemos algo en común - me guiñó un ojo - ves, no somos tan diferentes

Quizás no, quizás merece una oportunidad

- Respecto a lo del beso...

- Tranquila - dijo, interrumpiendóme y haciéndome dejar la frase a medias - haré como que nunca pasó

- ¿Y si quiero repetirlo? - tenté algo coqueta, ni que tuvieras con que seducir Nicole

- Pues...será nuestro pequeño secreto- al fin dices algo que me agrada escuchar Liam

Se inclinó y lo esquivé de mala gana, tontillo. Ahora me daba un poco de lástima sinceramente

- Calma Liam...- decidí decir antes que algo ofensivo o hiriente. Es que, suelo ser tan cortante que hago daño.

Claro que, Edgar me ganó en eso de ser fría...

- Llegamos - al fin, debo expresar y compartir con todos mis amigos ( los cuales no tengo) lo mucho que me alegró ( raramente) llegar a la escuela

Es que, este chico absorbía mi energía, en serio os lo digo. Es súper intenso, pero, aprendí con el, que no soporto los tíos empalagosos

Prefiero un Christian Grey, pero a la vez quiero un Luke Howland, quien me entiende?

- Pues...nos vemos luego - dije bastante incómoda y acomodando mi cabello

- De echo - Oh no, oh no, oh no - Estaba pensando que quizás podríamos salir juntos

Ay no

Ay no

Ay no

Y ahora que digo?

¡PIENSA NICOLE!

YA SÉ YA SÉ

- Emmm, no creo que tenga tiempo para ello - aclaré mi garganta e intenté sonar lo más pacífica posible

Su expresión cambió repentinamente, por fin veo su lado "triste", osea, no quiero ser falsa con el, bueno, con nadie

- No hay problema Nicole - rascó su nuca y sonrió- ya habrá más días

Eso se llama positivistas y yo, cariño, carezco de ello...

- ¿Qué decías gilipollas? - exclamó un Edgar Brown algo enfadado. Mi boca esbozo una perfecta "O" y mis ojos se querían salir de su órbita

- ¿Pero y tú qué haces aquí?

- Cállate Ross, que decías caraculo? -le preguntó a Liam

- Ross?

- Si, es mi apellido - dije algo incómoda, bueno, super incómoda

- ¡QUE TE CALLES NICOLE! - Ay ok, yo que he hecho? - DIME QUE COJONES QUERÍAS CON ELLA!

Uff se alteró el niño, joder que humos

- Solo la invitaba a salir - respondió Liam con esa sonrisa inocente - ¿Por qué, hay algún problema?

- Claro que no - dije intentando hablar algo

- ¡Que te calles! - hijo de tu pu...- Es mi chica - dijo mientras se acercaba a Liam, con su imponente dedo

- Ooooh no lo creo - dije y me lanzó una amenazante mirada

- Eso no lo mencionó cuando me besó- perfecto Liam, leña para el puto fuego

- ¿Es en serio Nicole? - guardé silencio, no sabía que decir, si la verdad o una mentira barata, de esas que compras en viernes negro o en rebajas - ¡HABLA NICOLE!

- Joder que si, que lo besé - Edgar se llevó los brazos a la altura de la cabeza, bastante frustrado

- ¿Te gustó? - Dios que pregunta

Los dos mantenían la mirada fija en mi, a la expectativa de lo que pudiese decir, que estresante

- Fue..... diferente - me limité a decir, no sabía ni que cojones responder

- ¿A que te refieres? - preguntó está vez Liam

- Parecía....real sabes, de esos con los ojos cerrados y repletos de sentimientos - los miré intentando grabar sus expresiones - no como los tuyos, tu transmites algo diferente

Respiré hondo y suspiré intentando calmar a mi pobre y agitado corazón

- Son diferentes - dije sin más. Sin darme cuenta y ni siquiera notarlo, Edgar golpeó el rostro de Liam, dejando una marca en su mejilla

- ¡COMO TE ATREVES IMBÉCIL! - volvió a golpearlo, yo estaba en shock no sabía que hacer - ¡ES MI CHICA ENTENDISTE!.

Esta vez le golpeó la entrepierna y creo que con eso fue más que suficiente para toda la vida

- Ok Ok, ya fue suficiente - exclamé mientras tomaba a Edgar por la espalda y lo alejaba del indefenso Liam

Por dios que bestia

- Ya vale, fue un error, tu eres el mejor, soy toda tuya, vámonos de aquí - el me abrazó y luego me cargó como si fuese un estúpido saco

- Por Dios Edgar

- Cállate...

Otra vez esa palabra