ੈ✩‧₊˚[ᴏᴄᴜʟᴛᴏ ᴇɴᴛʀᴇ ʟᴀ ᴀʀᴇɴᴀ]: ̗̀➛

PIJAmada

Capitulo 8: PIJAmada.

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N.O:

Teníamos a un bello peliplata siendo llevado como costal de papas por un azabache que mantenía una sonrisa triunfante en su rostro, pues "disimuladamente" tocaba el trasero del Omega el cual claramente lo notaba y daba una patada por la cual el alfa no se inmutaba ni un poco.

— ¡suéltame maldito depredador! — gritaba el Hatake mientras intentaba sacar una de sus armas de la maleta que llevaba el Alfa, este dió un pequeño brinco esperando que dejara de joder y aprovechar el momento para agarrarle una nalga, otra vez. Kakashi sentía que su rostro podría competir contra un tomate.

Por los pasillos del palacio (normalmente silenciosos.) Se escuchaban las quejas y reclamos de un Omega y al mismo tiempo el silencio de un Alfa. Después de un rato de gritar y golpear la espalda de Obito, Kakashi decidió detenerse ya que se le empezaban a cansar los brazos, al poco tiempo llegaron a una puerta de color morado de diferentes tonos, se podían ver piedras de un negro profundo y luego unas de un lavanda suave, pero Kakashi no pudo apreciar la belleza de esta puerta, pues el simplemente había entrado y dejado cuidadosamente el Hatake sobre unas sábanas sedosas de color morado metálico. Kakashi miro al alfa en frente suyo y un pequeño estremecimiento cruzó su cuerpo, sintió como aquel hombre trepaba por él hasta quedar encima suyo, un fuerte carmesí invadía sus mejillas y por reflejo termino lanzando un rodillazo, el cual cayó de lleno en el abdomen del alfa, este sintió como el aire abandonaba sus pulmones y agarrándose el estómago cayó al lado del Omega quien le miro entre divertido y preocupado, apretó la nariz del alfa para luego susurrar. — olvídalo perra, aún no me vas a tocar. — le dijo a Obito, preguntándose porque había agregado la palabra "aún". Supuso que a su Omega, en verdad le gustaba ese Alfa. Frunció el ceño en desacuerdo.

Bajó de la cama para acercarse a su maleta y sacar lo que sería su pijama. Sacó una Camisa negra con mascara (pues la otra estaba sucia) junto con un camisón de manga corta color blanco, y una pantaloneta negra, busco con la mirada un lugar donde poder cambiarse y encontró una cortina al fondo de la habitación, se dirigió a esta y empezó a cambiarse.

Al salir noto que el alfa ya se había cambiado de ropa y parecía esperarlo en la cama, su cuerpo estaba arropado por las finas telas y no podía ver más allá del abdomen marcado de aquel alfa, aparto la vista hacia un jarrón que estaba en la habitación… pues había sentido la necesidad de ver mucho más.

Había intentado dormír, claro que lo había hecho, no sabe cuántas veces había estado contando ovejas o cuántas veces había estado pensando en los discursos de su profesor de literatura, simplemente no podía dormir con la maldita respiración de Obito en el oído. Desde hace horas, HORAS había estado el alfa mirándolo "Dormir" estaba de espaldas a él así que suponía el otro no sabía que estaba ya despierto desde hace mucho, recordó lo que Hashirama le había dicho y tuvo la necesidad de patearle la cara lo más fuerte posible, pero su Omega interno chillaba en su oído cada vez que tenía un pensamiento de este tipo. Además, por alguna extraña razón se sentía muy pequeño ante la presencia de ese Alfa, se sentía como una presa, pero ésto él no lo sabía.

Cuatro horas, cuatro malditas horas en las que Obito había estado observándolo y por fin se había dormido, pero había un problema, ahora kakashi por más que lo deseara no podía conciliar el sueño, no con Obito al lado roncando como un cerdo. Deslizó su cuerpo lentamente fuera de la cama y puso dos almohadas en lo que sería su lado para que "supuestamente" el alfa pensara que seguía ahí.

Sus pies caminaron descalzos por la habitación hasta toparse con la puerta y al salir, ni siquiera le dió una mirada a la puerta y empezó a merodear buscando cierta habitación. Intentaba recordar el tur de Shikamaru, pues a él era precisamente a quien buscaba. Estuvo deambulando por todo el palacio, abriendo despacio cada habitación buscando al de pelo de piña, hasta que entró a una habitación con piedras de tonos verdes y en la cama logro divisar la cabellera del Alfa, pero no estaba solo, otra silueta al lado de la cama se encontraba de pie observando al castaño, un escalofrío le recorrió y estaba a punto de irse cuando por la luz de la luna logro divisar el rostro de aquella persona, era Hashirama, quien al sentir la presencia del Hatake volteo a verlo rápidamente y sus miradas se conectaron. Kakashi entro a la habitación dispuesto a pregunta que pasaba.