Bienvenida a Derry // Richie Tozier [✔️]

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Tn Denbrough

Al despertar cerré los ojos con fuerza y después parpadee un par de veces tratando de reconocer en dónde estaba hasta que los recuerdos de la noche anterior llegaron a mi mente.

Sonreí sintiendo el brazo de Richie en mi cintura tomando una de mis manos, se sentía como un sueño estar así con él.

Me di la vuelta para observarlo dormir durante algunos minutos sonriendo. Subí una mano a su mejilla haciéndolo saltar por la sensación pero sin llegar a despertarlo. Sentí sus manos apretarse en mi cintura y después pegarme más a él haciéndome contener el aliento con las mejillas ardiendo.

Sabía que tenía que irme pero no quería, quería quedarme aquí con él abrazándolo tanto como me fuera posible, pero posiblemente si Bill se daba cuenta de mi ausencia me iría mal.

Quité sus manos de mi cintura para luego levantarme con pereza. Me sobresalté al oír la puerta abrirse, aunque fue con delicadeza.

—Tn —me llamó Verónica y la miré tragando saliva al sentir la mano de Richie caer sobre mi pierna—. Voy a salir y es para llevarte a tu casa de una vez.

—Enseguida voy —respondí y ella asintió saliendo de la habitación dejando la puerta abierta.

Suspiré tomando mis lentes de sobre la mesita y miré a Richie saltando en mi lugar cuando apretó la mano en mi pierna. La quité de allí para poderme levantar con el corazón latiendo demasiado rápido.

—¿A dónde vas? —preguntó adormilado mientras me ponía de pie haciendo qué lo mirara.

—Tengo que volver a mi casa —Sonreí de ternura al verlo abrir un ojo para mirarme.

—Espera y te acompaño —Hizo el intento de levantarse pero no lo dejé ya que estaba medio dormido, era mejor que descansara.

—Richie tienes sueño, quédate aquí ¿Sí? Duerme hasta la hora que quieras y después nos vemos —hablé sonriendo y el asintió con los ojos cerrados.

—De acuerdo —respondió y me acerqué a él dejando un beso en su mejilla dispuesta a levantarme pero me tomó de la muñeca haciéndome caer en la cama—. Dame otro.

Solté una risa y dejé un corto beso en sus labios sintiéndolo sonreír para después separarme sonriendo.

—Hasta luego —me despedí para luego levantarme y ahora sí, salir de la habitación.

Bajé las escaleras en dirección a la puerta donde Verónica me esperaba y al llegar junto a ella ambas salimos de la casa en dirección a su auto para entrar en el.

—Si quieres quédate con la ropa —habló ella comenzando a conducir y abrí los ojos al darme cuenta que no me había cambiado.

—Perdón. Debí cambiarme antes de salir —Solté una risa nerviosa.