Hoyuelos y lunares

Capítulo 1. Primer día

Primer día de escuela, ¿soy la única que siente que el primer día puede llegar a ser desastroso? Porque eso siempre me lo he preguntado desde que tengo memoria

La universidad puede ser una herramienta de autodescubrimiento para muchos de nosotros pero para mi es un boleto para más estrés y ansiedad, es como si al poner un pie ahí te llegara una invitación al celular diciendo: "Felicidades, acabas de entrar al lugar donde pasarás la mayor parte de tu tiempo estresado/a y no cantando mientras sonríes como en High School Musical". Pero algo bueno debe de salir de esto, ¿verdad?

En fin, al menos espero tener mi "lover era" o algo que no sea solo lo que estoy pensando

- ¡Maryan baja a desayunar ya, que se te va a hacer tarde! - gritó mi mamá desde la cocina

Termine de guardar mis cosas en mi mochila y baje trotando los escalones hasta la cocina

- Buenos días, mamá - le dije saludándola con un beso en la mejilla

- ¿Lista para tu primer día en la universidad? - dijo mientras ponía mi desayuno en el plato

- Claro mamá, siempre he amado los primeros días de escuela, ¿no notas mi alegría? - contesté sarcásticamente mientras bebía un poco de leche de chocolate

- Vamos cariño, no será tan malo, solo disfrútalo y se tu misma. Jamás falla y lo sabes - asentí y comencé a comer el desayuno mientras revisaba por 8va vez mi horario de clases

Termine mi desayuno entre pláticas con mi mamá de cómo planea que será mi primer día. Subí a lavarme los dientes y al terminar entre a mi habitación para corroborar que nada se me olvidara. Antes de salir de mi casa sonó mi celular - ¿a que no te imaginas quien podrá ser? - le dije a mi subconsciente mientras sacaba el celular de mi bolsillo

- Bueno...

- Vamos hermanita, ¿quieres que te lleve a la universidad y te tardas mil horas en salir?, voy a dejarte varada si no sales ya

Les presento a mi amigo/hermano Yonathan Rodríguez, lo conocí en 6to de primaria era el nuevo y desde el primer momento que hablamos supimos que debíamos ser amigos hasta el fin de nuestros días. Yonathan es muy alto, flaquito pero con músculos, tatuado de los brazos, pecho, espalda y un poco del cuello, cabello lacio corto y pintado de color azul con rojo y de edad es más grande que yo (exacto, perdió dos años y por eso lo conocí en 6to de primaria) pero de los dos soy la única que estudia la universidad, ¿por qué? Se preguntarán y la sencilla respuesta es que él es un artista, no quiso estudiar lo que todos quieren: leyes, administración de empresas, arquitectura, etc
A él le apasiona el arte, además de que hace pinturas también diseña vestidos de todo tipo. Según él diseñará el mío cuando me case pero ¡POR DIOS! ni siquiera novio tengo ¿como planea hacer eso?

- Que exagerado, más bien tú no tienes paciencia de nada - cerré la puerta de mi casa y le dije mientras iba camino al auto

- Vamos chica que hoy es tu día de brillar

Entre al auto, pase mi mochila en la parte trasera y Yon comenzó a conducir hacia mi escuela

- Dios, es casi lo mismo que dijo mi mamá ¿por qué soy la única que anda negativa hoy?

- Digamos que esperaste un año para entrar a la universidad y según tú ya ni siquiera sabes qué es socializar - volteó a verme por un segundo y regreso su mirada en el camino - es que es cierto, de por si mi lado introvertido quiere salir en cualquier momento y empeorar todo - bufe - ¿Dejarías que pusiera música?

Solo asintió, saqué mi celular y puse mi canción favorita "dimple" de BTS. Yonathan solo negó divertido y comenzó a tararear la canción junto conmigo en lo que ya llegabamos al campus. Cinco minutos después paró enfrente de mi escuela, me deseó un buen día mientras yo salía del auto, le di las gracias y comencé a caminar hacia la entrada