"El proyecto personal de Nolan Hamilton"

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Entré a la academia apenas cumplidos los 18. Había terminado la secundaria hace unos meses y ya no sabía qué hacer con mi vida, eso hasta que, en una cena familiar, mi abuelo bebió de más y se puso a gritar frente a todos acerca de cómo su sueño de ser policía se había arruinado el día que él y mi abuela fecundaron a mi tío.

Hubo unas cuantas lágrimas de parte de mi abuela causadas por la capa más real de mi abuelo. Dicen que cuando estas borracho te muestras al mundo como realmente eres, y yo lo creo.

Pero me estoy saliendo del tema.

El asuntó es que entré el 20 de abril del 2008.

No tuve problemas con el ingreso, mi 1.74 me aseguraba la entrada. Pero una vez dentro, y siendo un flacucho que sacó la idea de ser policía de su abuelo borracho, solo por no saber qué hacer con su vida, me convertí en el bufón de mis demás compañeros en unas pocas semanas iniciadas las clases.

Solían robarme la comida, empujarme desde los últimos tres escalones, llevarse mi ropa y dejarla tirada en el patio, poner mayonesa en mis zapatos, y toda clase de bromas pesadas. Nada peligroso claro, no vaya a ser que "el imbécil descuidado de Pablo volvió a resbalar".

Bueno, cuando llegué a la mitad de la preparación decidí cambiar eso.

Empecé a entrenar más de lo que debía, llueve o truene, corriendo en el asfalto ya sea a 20o o 36o, todo para detenerlos. Y lo hice, los detuve. Cuando se dieron cuenta de que ya sabía defenderme me dejaron en paz. Pero esta no es una historia de superación personal, es la historia del peor ser humano que he conocido en mis 21 años de vida.

Fue hace dos meses y 6 días. Era un día de arduo trabajo en la oficina, y entre las decenas de denuncias diarias, una resaltó entre las demás.

"Un chico desaparecido... Thomas Coronado" Algo así me dijo Louis, mi compañero detective.

Él apenas llevaba un par de meses trabajando, pero al jefe de departamento le pareció buena idea darle un caso de desaparición.

"Los antecedentes muestran dos escapes anteriores" Me había dicho.

"¿Y cuánto tiempo estuvo perdido?"

"La primera vez 16 horas y la segunda 2 días"

"¿Y cuánto lleva?"

"1 Día"

"Bueno, talvez vuelva en unas horas. De todas formas, saldremos a investigar un rato, ¿verdad?"

Pero Louis me detuvo, dijo que esta vez era diferente.

Me contó que cuando la denuncia se hizo, la madre venía con lágrimas en los ojos. Le dijo que él no se fue, se lo llevaron.

¿Cómo lo sabía? En todas las otras ocasiones, Thomas había hecho una maleta donde metía comida, ropa y objetos de valor sentimental, pero esta vez lo único que faltaba era su teléfono.

"Eso suena diferente"

"Lo es"

Louis se despidió, diciéndome que investigaría un poco por su cuenta.

Después de 3 días sin señales de Thomas la cosa se puso seria.

El director del departamento creó equipos para buscarlo por toda la ciudad. Lo hicieron por 2 semanas, pero no había éxito, y debido a que se estaba gastando mucho presupuesto, los equipos se redujeron a la mitad.

Eso hizo enojar a Louis, él estaba determinado en encontrar al chico cueste lo que cueste. Se lo había jurado a su madre hace un par de días en ese momento.

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