De la tierra en el planeta surgieron dos personas, Adrián y su esposa, Layla. Una voz le habló a Adrián, presentándole el lugar donde pasarían el resto de sus vidas. Adrián necesitaba a alguien para que le hiciera compañía, de ahí viene Layla, su esposa. Este rol dado por esa voz inquietó a Layla, puesto que este papel parecía restarle importancia a ella, Por lo que Layla siempre tuvo la intención de demostrar que ella valía tanto como Adrián. En un pequeño paseo, Adrián le exige a Layla quesea sumisa ante él y le obedezca en todo momento, lo que enfurece a Layla
Layla se niega a esto, y expresa su punto de vista. Le dice a Adrián que ella es mas que una simple compañía o una cara bonita. Layla se va y empieza a llamar a la voz. La voz aparece y habla con Layla, la cual piensa que la voz la ayudará y hará que Adrián entre en razón. Son embargo, la actitud de la voz es completamente igual a la de Adrián, y esta voz condiciona a Layla, pues si no acepta su rol será remplazada por alguien más. Layla sigue sin aceptar su rol, lo cual la hace acreedora del castigo de la voz. Siendo desterrada a las afueras de ese mundo perfecto y siendo remplazada por Evelyn, una mujer igual de bella que Layla, pero sumisa y obediente, tal como la voz y Adrián querían.
Evelyn entiende que merecen algo más, y se une a Layla para hacer ver que ellas son tan valiosas como lo es Adrián. Evelyn empieza a expresarle su sentir a Adán y este se enoja, diciendo que si no obedece será remplazada. Durante la discusión llega Layla, quien apoya a Evelyn. Son interrumpidas por la voz, y las dos empiezan a expresar su punto. La voz comprende el punto e ellas, y le hace ver a Adrián lo equivocados que están. Así, Adrián cambia de mentalidad y continua una vida feliz con Evelyn, mientras Layla promete luchar cada que existe una injusticia hacia ellas
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
