⤹˚˖ día y noche. lawlu fem! ☁️

el día y la noche.

Eran las cinco en punto de la mañana, y el cielo seguía oscuro. Era el primer invierno que pasaban juntas, Luffy estaba aferrada al cuello de Law y aunque a esta última casi casi casi nunca le gustaba el contacto físico; agradecía que su novia estuviera pegada a ella debido al frío que sentía.

Al abrir los ojos fue lo primero que vió, esa pequeña cicatriz en el ojo de Lu y seguido por sus ojos que seguían cerrados. Sonrío y dejó un besito en la frente de su pareja para después intentar quitarla de encima. Luffy tomó una almohada y la abrazó por la ausencia del cuerpo más grande. Law tomó una ducha y cepilló sus dientes. Cuando salió del baño, la cama daba frente a la puerta así que pudo ver a una soñolienta Lu tallándose los ojitos.

-Torao, buenos días.

Law sonrío sin pensarlo, pues lo primero que había escuchado en el día era un Torao de su amor.

-Buenos días, Lu. -dijo mientras caminaba hacia ella para dejar otro beso en sus labios.

Luffy la apartó rápidamente y tapó su boca. -Amor no, aún no lavó mis dientes, de seguro tengo mal aliento. -lo miró con sus entrecejo arrugado y debajo de su boca un puchero. Trafalgar rió demasiado fuerte y eso contagió a Luffy que empezó a reír con ella.

-¿Y qué haces despierta tan temprano? -preguntó Law. En toda la semana que llevaban viviendo y durmiendo juntas, jamás Lu había despertado a las cinco de la madrugada.

-Pues porque hoy empiezas a trabajar después de tus vacaciones y quería preparar tu desayuno. -una sonrisa bonita se formó en su rostro después de contestar eso ante la pregunta de la mayor. -Cámbiate rápido que ya te preparo tu comida, mi amor.

Law escuchó como Luffy bajaba las escaleras y de nuevo sonrió. Ante el mundo y la gente, toda su vida fue una persona seria y muchas veces la llamaban amargada o aguafiestas y la verdad es que sí lo era, menos con Luffy. Luffy lo era todo para ella, desde que la conoció, Luffy tenía todo su amor, su comprensión, su cariño y su tiempo... Aunque bueno, este último a veces era muy poco debido a su carrera como profesional de salud.

Bajó las escaleras y pasó por la sala para poder llegar a la cocina. Luffy ya tenía una lonchera lista y estaba preparando su café. Cuando vio a Torao le sonrió y le extendió la caja cerrada que había preparado.

-Anoche ví muchos vídeos de recetas y quería hacerte alguna. Tu café es sin azúcar como te gusta.

-Gracias mi vida. Te ves muy linda cuando cocinas. -dijo de forma coqueta lo último.

Lu se sonrojó. -Pero ni siquiera me viste cocinando.

-Pues no pero me imagino que sí, tú te ves muy linda haciendo todo.

Luffy no pudo más y fue hacia ella que se encontraba del otro lado del banco de la cocina para abrazarla. Law la abrazo de vuelta con fuerza y la dió vueltas con ella. El café y el desayuno ya estaban listos y ya eran más de las cinco con cuarenta minutos, Law tenía que irse.

-¿Hoy no vendrás tan tarde? -cuestionó Lu a su novia.

-Aún no lo sé, pero te aviso si llega a ser así, ¿sí? -le contestó mientras tomaba sus cosas para después darle un beso y caminar hasta la puerta.

Luffy entró a la casa de nuevo al ver el auto de Law salir de su garaje. Entró al baño a ducharse y al salir se quedó un rato en bata para aplicar sus cremas de cabello al mismo y para arreglarse para ir a su trabajo. Trabajaba como maestra de deporte en una secundaria privada que quedaba muy cerca, pero entraba hasta las nueve así que durante dos horas y media se quedó haciendo los quehaceres básicos del hogar.