Be strong | Shawn Mendes (EDITANDO)

Alguien.

¿Estoy muerta? ¿En dónde estoy? ¿Qué es esto? ¿Qué sucedió? Tantas preguntas pasaban por mi cabeza. Parecía estar en un hospital,creí estar sola. Hasta que una persona apareció. Un chico, muy lindo de hecho, alto, cabello marrón oscuro, musculoso. Perfecto por así decirlo. Y se acercaba a mi.

-¿Quién eres?-pregunté.

-Mi nombre es Shawn, ¿Cual es tu nombre?

-Ah, hola. Soy Emily. ¿Sabes que es lo que me paso?

-Creo que tu lo sabes mejor que yo...-me contesto.

-No lo se, por eso estoy preguntándote.

-Lo que paso, es que anoche, estaba caminando por una plaza, y te encontré. No se como hice para verte. Pero por alguna razón te vi, y es por esta. ¿Que fue lo que te sucedió en el rostro, y en el antebrazo? Sangrabas cuando te encontré.

-Oh, no me acordaba, gracias por traerme aquí, ahora solo vete.

-¿Por qué? Quiero ayudarte.-Me contestó Shawn.

-No quiero tu ayuda, no se quien eres, joder. -

Me levanté de la camilla y corrí con mis pocas fuerzas para salir de allí, creí que no podría salir, pero por suerte la puerta estaba abierta, y logré correr. Al llegar a mi casa, me recosté en mi habitación, y pensé, en quien era ese chico, por que no logre morir? Que había sucedido? No lo se, lo único que se es que me había salvado la vida, sin ninguna razón. Seguro es un idiota como Effy y todos esos de mi colegio. No quiero verlo nunca más. Me recosté y me dormí.

A la mañana siguiente

Me levanté con un vacío más grande de lo normal. Y obviamente sería así, he perdido a mi madre, por culpa mía, me he encargado de arruinar toda mi vida, yo sola, me he dejado llevar por lo que los demás decían, y me fui hundiendo más y más. Pero por mi propia voluntad, yo me dejé caer, deje de preocuparme, simplemente me había rendido ante la vida. Pero no sé que hacer ahora, creo que debería intentar salir adelante, por mi madre, pero ya que ella no está aquí, no tengo nadie en quien apoyarme, nadie que se preocupe por mí tanto como ella lo hacía. Mi padre se preocupa por mi; pero no tanto como ella, jamás ha logrado entenderme, ni lo ha intentado... No sé que haré... solo necesito alguien que me demuestre que si valgo algo. Que no soy lo que creo, que de verdad vale la pena seguir intentando.