Les seré sincera, llevo días enferma, supongo que fue algo que ingerí pero no solo me duele el estómago, he tenido una fiebre espantosa, mis amigas asisten a clases normales y yo una semana sin ir, les avise a los profesores. Me acabo de bañar para venir a desayunar a las dos de la tarde.
-Hei! Ya llegué – Dice Romí - ¿Sigues viva?
- Hey Romí – digo sin ánimos – Si, desgraciadamente aun sigo viva
- No seas dramática – Se ríe – Espero que estés bien porque vendrán personas a visitarte
- ¿A mí? Solo la muerte – Digo y voy a la sala – Ya estoy mejor, aun me duele la cabeza pero estoy bien
- Deberías de estar acostada, corre – Dice empujándome a mi habitación – Ahorita te llevo de comer
¡Agh! Me chocaba estar enferma porque movía mi rutina, me recosté pero puse un poco de música antes, se escuchó la puerta de la entrada y escuche la voz de Kathe y otras personas, ya me había aburrido así que me iba a dormir un momento pero se escuchó la puerta.
- ¿Puedo pasar? – Dice él
- No, vete de aquí – Digo lanzándole una almohada
- Heidy, estoy preocupado por ti, hace una semana que no asistes a clases – Dice sentándose en mi cama
- Mi vida académica no debería importarte así como la personal – Digo seria
- Heidy comprende, me gustas ¿Okey? – dice sin más – pero...
- Pero solo ofreces tu amistad, ya me quedó muy claro ¿Okey?, ahora largo
- No me voy a ir, ya me cansé – suspira y sigue – Ya no huiré mas
Se inclina y me besa, pero esta vez lo rechazo no quiero sufrir por una estupidez, además estoy enferma y no soportare sus estupideces el día de hoy
- ¿En dónde estabas? – Dice y me sigue lastimando - ¿En dónde habías estado?
- No sé de qué hablas, ¿estás tomado o algo? – Digo confundida
- Me gustas – suspira – No quería aceptarlo por miedo a lastimarte, pero me gustas – Toma mi mano y yo me pongo nerviosa – Eres maravillosa, muy querida por todos y esta semana sin ti en clase fue un infierno y al enterarme que estabas mal de salud me asuste – toma aliento – No sé qué haría sin ti....
- No... No te hagas esto, si no me quieres está bien, solo aléjate de mí – sonrío
- Me encantas, me fascinas – Toma mi mejilla – Lo siento por lo anterior, tu no tenías la culpa y estabas sufriendo demasiado.
- ¿Yo sufriendo? Si pero no por eso, yo también cuento con mis problemas – Digo y quito su mano
-Me vale una mierda si estas desnuda, Hei tenemos que irnos, es urgente – Dice Romí interrumpiendo
- ¿Urgente? ¿Qué sucede? – Digo asustada por su expresión
- Ronny... él – Agacha la cabeza – Él tuvo un accidente y....
- Dime que está bien, por favor – Digo desesperada – Él no...
- No lo sé, está en el hospital y como nuestras familia está en México no pueden venir y... - Llora – Hei...
- Voy para allá, no me puedo quedar sin saber en dónde está mi baby, la vida me odia, pero él no, ya suficiente tuve con Camila.
Salgo desesperada, no puedo esperar un taxi, veré si encuentro alguno en el camino, mi amiga va detrás de mí, es nuestro amigo, hermano diría yo, ha estado ahí y no se puede ir así como así.
-Chicas, suban al auto yo las llevo – Dice Nathan – Vamos así llegarán más rápido
- Vayan ustedes, yo tengo que ir por...- Dice dejando al aire ya que nadie sabe de él
- Okey, te cuidas mucho – sonrío triste
Subo al auto, él lo enciende y avanza, no me puedo tranquilizar, yo sé que está bien, eso espero, pero tal vez a él lo quiero más que Camila.
-Heidy – Habla Nathan y para el auto – Él está bien, solo Cálmate
- No puedo, no lo puedo perder – Suelto un sollozo
- Hei mírame, aquí estoy contigo, él está bien ¿Okey? – Me besa – Ahora solo Cálmate y respira
Al llegar al estacionamiento del hospital me puse más nerviosa, estacionó el auto, tomo mi mano y nos dirigimos al interior del hospital, preguntamos por Ronny y nos dijeron que tuvo un fuerte accidente, perdió el control y choco, el llevaba el cinturón de seguridad, por poco y pierde la vida, pero que estaba estable, por el momento estaba dormido, pero pronto pasaríamos a verlo. Nos fuimos a sentar para esperar a Romí.
-Está bien, ahora solo... - solloce – Ven acá – dice abrazándome
Todo era oscuro, mi amigo estaba bien, pero tenía tanto miedo, deje de respirar por un momento, creí que no volvería a vivirlo de nuevo, me levante vi que llego Romí con...
-Heidy yo sé que no quieres verme pero... - Dice él mientras se acerca
- También es tu amigo, estas en tu derecho, David– Digo y me siento al lado de Nathan para abrazarlo
El tiempo pasa lento, quiero y necesito ver que está bien, Nathan ha estado todo el tiempo conmigo, Romí ha estado con David pero llega Marco y se va con él.
-Familiares del joven Ronny – Dice el doctor y yo me levanto
- Soy su hermana ¿Cómo está? – Pregunto preocupada
- Está estable, acaba de despertar y quiere ver a Heidy Wagner
- Soy yo justamente
Entro a su habitación y ahí está mi amigo, super herido pero vivo, corro hacia él para abrazarlo, al hacerlo él se queja.
-Wagner, estoy bien – Dice mirándome a los ojos
- Imbécil, eres un imbécil ¿Quién te mando a tener un accidente? Carajo Ronny me asuste tanto – me echo a llorar – Creí que a ti también te perdería y...
- No seas dramática, jamás te vas a deshacer de mi – ríe – Te quiero
Después de una larga charla, salí porque él tenía que descansar y yo también, Romí y David ya se habían ido, solo estaba Nathan esperándome, decidí no decir nada, mi día había sido un desastre como para arruinarlo más, de repente cambia el rumbo y se dirige hacia su apartamento.
- ¿Qué haces? –
- No creo que sea prudente llevarte a tu apartamento, está Romí y su novio – sonríe – a menos que quieras escuchar...
- No lo digas, voy contigo, me quedo claro – Digo super sonrojada
Llegamos a su apartamento y no hay nadie, esto si es raro, me deja pasar primero y me siento en el sofá, él me observa y yo no puedo estar más roja, a estoy tranquila porque mi amigo está bien, él se acerca y se sienta a mi lado.
-Hei, no sé si quieras hablar de eso conmigo, pero... ¿Quién es Camila? – Pregunta con curiosidad –
- Es... - No fluyen las palabras por más que quiero
- Está bien si no quieres hablar de eso – Suspira y me abraza.
- Era mi hermana... - Las lágrimas comienzan
- De verdad, si te hace daño, para – toma mi mentón y me mira a los ojos – No me gusta verte llorar
- Peleamos, ella aumento la velocidad del auto, todo paso tan rápido, el choque fue de su lado y ella murió – concluyo y lo abrazo
- Todo está bien, ella está en un lugar mejor y agradezco que tu estés aquí – Me abraza