Había una cosa que AFO siempre considero inútil, más que nada a la gente que ejercía esa profesión cuando si bien no les costaría nada ser un héroe como Sir Nighteye o Nezu. Y eso eran los detectives y la gente de la fuerza policial.
Siempre actuaban por debajo de los héroes y parecían más que nada relleno para exagerar películas de heroes poniéndolos a ellos como la dama en apuros 2.0, los personajes que no hacían nada más que estorbar y esperar a ser salvados.
Sabía que no era el único, varias personas pensaban igual que él y había conversado con demasiadas personas que pensaban lo mismo que él. Realmente no le sorprendía mucho la mala reputación de los policías y detectives, ya los había visto en persona y eran mil veces más inútiles que lo que de veía en las películas. Y eso ya es decir mucho.
Con tantos heroes con quirks que aumentaban sus conocimientos y la facilidad que tenían para aprender, ¿Enserio seguían teniendo detectives? Eran la cosa más inútil del mundo, seguramente ni servían para carne de cañón por qué a nadie de ese mundo lleno de heroes le importaban.
Su opinión no cambio justo en el instante en el que fue interrogado por un nervioso detective después de un ataque de villanos que el mismo había ordenado. Se camuflo en la multitud para aparentar ser uno de los varios civiles preocupados y ahora lo estaban interrogando para saber los hechos.
El detective tenía el pelo verde y cuatro pecas en forma de diamante en sus mejillas. Cosas que el odiaba, realmente el color verde nunca fue uno de sus favoritos y ni hablar de las pecas que solo le recordaban a su hermano.
El detective se esforzó mucho para ocultar su placa de oficial enfrente de el, tratando de mover su abrigo de detective de película de misterio genérica, para que no viera su placa que era claramente visible.
Le sorprendió ver a alguien tan joven en con una placa de detective, según él se necesitaba tener 23 años para acabar la carrera de detective y ese niño apenas parecía tener 17 años.
"Y por último, ¿Cuál es su quirk?" Preguntó el detective de pelo verde, con su cuerpo temblando de nervios y pareciendo alguien demasiado débil. Se notaba desde lejos que ese chico apenas había empezado la profesión.
AFO suspiró en un intento de ignorar todo el aburrimiento que tenía y se inclino en la silla de manera juguetona.
"Puedo cambiar temporalmente el color de un objeto" Respondió All For One con aburrimiento, ese quirk lo había robado recientemente y con ese mismo quirk había registrado su identidad de civil que estaba usando ahorita mismo para ver el caos que había hecho ese día.
Al detective de pelo verde se le iluminaron los ojos al escucharlo, esos ojos parecían dos pares de estrellas viéndolo "¿Puedes cambiar el color de dos objetos al mismo tiempo? ¿Que pasa si tocas un objeto que ya está machado? ¿La pintura sigue ahí o se vuelve completamente del color del que la quisiste convertir? ¿Tu quirk se activa por vista o por contacto?"
AFO frunció el ceño, ¿Esto era enserio? No recordaba que los detectives fueran tan molestos con preguntas acerca de quirks.
Fingió una sonrisa y respondió un par de preguntas del montón que hacía el detective de pelo verde. Según él, entre más respondiera más rápido lo dejaría el detective.
Sin embargo las preguntas del detective siguieron sin parar y entre más respondía más preguntas hacía. De echo hasta el detective le dio una que otra sugerencia para el quirk con el que se había registrado en su identidad civil.
"¿Son necesarias tantas preguntas acerca de mi quirk?" Pregunto AFO a regañadientes después de responder a la milésima pregunta del detective de pelo verde.
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•Villaintective•
FanfictionAFO pensó que toda su vida iba a ser dedicada a la maldad, pero al ver a un pequeño detective con ojos verdes y brillantes sonrisas decide que tal vez su vida no sería totalmente dedicada al mal.