El sol empezaba a desaparecer en el horizonte y mi habitación se oscureció junto con el cielo del exterior. Releí por enésima vez el último párrafo. Intentaba memorizar el último tema de historia que entraba en el examen que tenía al día siguiente, pero me era imposible. Y él era la razón. Jung Ho Seok. O J-Hope, como a él le gustaba que le llamasen.
J-Hope había sido mi mejor amigo desde que tenía uso de razón. Siempre me había protegido de los abusones, me había consolado en los peores momentos de mi vida y me había hecho reír sin importar el qué. Siempre tenía detalles conmigo que me encantaban y me hacía sentir especial. Pero, por alguna razón, las últimas semanas no habían sido tan buenas para nuestra amistad. Las peleas constantes, sus cambios de humor y su mal genio habían aflorado por cosas sumamente idiotas. Se ponía celoso por cualquier chorrada y notaba la inseguridad detrás de sus ojos. Sin embargo, él se negaba a hablar sobre el tema y yo cada vez estaba más harta.
¿Le quieres? Os preguntaréis. Por supuesto que le quiero. No estaría aguantando de no ser así. Era mi mejor amigo, sí, pero sentía mucho más por él que una "amistad". Con tan solo una de sus sonrisas me hacía sentir un zoológico entero en mi estómago, pero cada día me hacía sentir más insegura de lo que él sentía por mí por su actitud. En alguna ocasión había llegado a pensar que él sentía lo mismo, pero luego hacía algo que me hacía pensar todo lo contrario. Así que allí estaba, intentando estudiar mientras el cacharro infernal al que yo llamo móvil no dejaba de vibrar e iluminarse debido a las llamadas y mensajes constantes de mi mejor amigo. Habíamos discutido esa misma mañana, ya ni siquiera recuerdo el motivo. Mentira, sí lo recordaba, pero prefería no pensar en él y sus idas de olla.
Suspiré agobiada y agarré el teléfono cansada de intentar evitar algo inevitable.
- ¿Qué quieres? Te dije que tenía que estu... - empecé a protestar pero él me cortó.
- Estoy delante de tu casa. - no pude percibir ninguna emoción en su voz que me diese una pista de cómo se sentía en ese momento.
- ¿Qué...? - pregunté confusa. ¿Qué demonios hacía aquí?
Me levanté de la silla y caminé rápido hacia la ventana, echando una ojeada fuera. Y efectivamente, J-Hope estaba frente a la puerta de mi casa sosteniendo el móvil en su oreja. Dirigió su mirada hacia mí, una mirada seria que me caló en lo más hondo. Jamás le había visto tan tenso y esa tensión empezó a recorrerme a mí también.
- ¿No vas a abrirme? - preguntó serio, manteniendo la conexión de nuestras miradas.
No fui capaz de responder. Parpadeé confusa un par de segundos y, cuando fui consciente de que seguía mirándome con la misma intensidad, me separé de la ventana respirando agitada. ¿Qué demonios me pasaba? No era la primera vez que veía a J-Hope cabreado, sin embargo... Esa vez era diferente. Algo en él era diferente.
Intenté relajar mi respiración y caminé hacia la puerta de casa algo nerviosa. Más bien muy nerviosa. Cuando llegué, inhalé despacio y abrí lentamente la puerta.
J-Hope me miró de arriba abajo, lentamente recorriendo cada parte de mi cuerpo. Yo me quedé muda. Su mirada me hizo sentir como si aquel top y aquella falda que estaba vistiendo no existiesen.
- ¿No vas a dejarme pasar? - arqueó una ceja.
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Bueno, ¡aquí la primera parte del one shot! ¿Qué os ha parecido? ¿Tenéis ganas de más?
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Mine. (One Shot Jung Ho Seok / J-Hope)
Fanfiction- Di que eres mía... - murmuró roncamente en mi oído - Dilo... Vamos, dilo. - Soy tuya...