I'll never let you go.

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Sus ojos intentaban adaptarse a la oscuridad de la noche, no sabía qué hora era, por lo que intentó encontrar su teléfono sobre la mesita de noche, sin éxito. Su respiración estaba agitada, podía sentir su corazón latir más rápido de lo normal, mientras el sudor corría por su frente.

"Solo fue un sueño" - Pensó en voz alta, intentando convencerse a sí misma que nada de lo que vio, fue real. Poco a poco comenzó a tranquilizarse, aunque la angustia que sentía permanecía en su pecho y amenazaba con hacerla llorar.

"Incluso después de tanto tiempo, sigues haciéndome falta" – Dijo en voz alta, con la intención de que su voz se escuchara por toda la habitación. Una tenue risa siguió sus palabras, proveniente desde un extremo de su cuarto, apenas perceptible por sobre el ruido que hacían la lluvia y el viento.

"No entiendo qué esperas, amor" – Volvió a hablar, mientras se sentaba en la orilla de su cama. Intentó encender la luz, pero no había electricidad. "Maldita tormenta" – Exclamó irritada y se puso de pie en medio de la oscuridad.

Caminó lentamente hacia la esquina desde donde provenía la risa, pero no encontró a nadie allí.

"Minho, ¿Dónde estás?" – Preguntó – "Aún puedo sentir tu aroma" – Continuó, mientras miraba por sobre su hombro al resto de la habitación. Su perfume seguía en el aire, ese aroma que tanto la volvía loca. Su mente viajó, y pudo verse abrazada a él, respirando sobre su cuello, mientras el mostraba una amplia sonrisa.

"Crack" – Pudo escucharse a sus espaldas. Al girar, vio una delicada sombra pasar por su puerta. Corrió hacia ella, intentado verlo nuevamente, pero solo recibió un leve susurro. "Aline" – La llamó, con una voz que parecía casi un gruñido erizando su piel, tal como ocurría cuando la rodeaba por la cintura con sus brazos y besaba su cuello, susurrando su nombre en su oído.

Ella cerró sus ojos esperando algo más de su parte, pero nada ocurrió. Decidió regresar a su cama, estaba volviéndose loca, necesitaba sentir sus manos rodeando su cuello y el calor de su aliento sobre su piel, pero el ya no estaba, y no había nada que pudiera hacer para traerlo de vuelta. En su mente seguía reproduciéndose aquella canción que sintieron suya antes de separarse;

"Never say goodbye, because we are one
Because we will walk together in the same dream
Continue smiling by my side just like this moment
Longer than tomorrow, farther than eternity
I love you"

"Desearía haber muerto también" – Fueron sus palabras al acostarse nuevamente. Miró unos minutos al techo mientras su mente divagaba, hasta que comenzó a sentir sueño nuevamente. Su cuerpo se relajó, cayendo lentamente en un trance.

Lo primero que pudo ver fueron sus ojos. La oscuridad cubría su mirada y sus pupilas se encontraban contraídas, dándoles la apariencia de encontrarse vacíos y fríos, pero aún lograban hipnotizarla. De pronto, sintió como se hundía el colchón a su lado. Sonrió mientras movía su mano intentando alcanzarlo, por fin estaba junto a ella, pero no logró sentirlo. Su corazón se entristeció y abrió sus ojos al tiempo que sentía algo cálido correr por su rostro.

Llevó su mano a su nariz, tratando de evitar que la sangre siguiera saliendo, pero era demasiada. Sintió miedo, una punzada se instaló en su cabeza y su visión se volvió borrosa. Comenzó a escuchar algo que crujía, un dolor intenso se apoderó de sus piernas y comenzó a subir hacia el resto de su cuerpo. Sus huesos se estaban rompiendo.

Gritó una y otra vez, hasta que sus pulmones se quedaron sin aire. De pronto, por más que lo intentaba, no podía respirar. No importaba lo que hiciera, el aire no pasaba más allá de su tráquea. Sus gritos se convirtieron en estridor y pudo sentir como salía sangre por su boca también. Llevó sus manos a su cuello, pero no lograba sentirlo, en su lugar, palpó algo con filo, rodeado por restos de piel y carne que se desprendían de su anatomía.

Cerró sus ojos una vez más. Cuando los volvió a abrir la habitación estaba al revés. Su cuerpo se encontraba pegado al techo, sintió que caería, pero no se movió. No entendía lo que sucedía, miró a su alrededor, pero solo había oscuridad.

"Ayúdenla" – Gritaba una mujer, podía escucharla cerca pero no la veía. Varias voces se unieron al primer grito, entre ellas, la de su amado. Volvió a buscarlo con la mirada por la habitación, mientras sentía como sus fuerzas se agotaban, hasta que lo vio. Sus ojos se encontraban fijos en ella y una expresión de terror dominaba su rostro.

"Ya vienen a ayudarnos, amor" –Dijo Lee Know mientras intentaba tomar su mano, pero alguien lo sujetaba, manteniéndolo lejos de ella – "Estoy aquí contigo, prometí que nunca te dejaría"

"Minho, ayúdame, por favor" – Le suplicó – "Me duele".

Pero su voz no podía oírse y el no pudo moverse, en su lugar, comenzó a gritar su nombre. Sus ojos recorrían el cuerpo de la chica, hasta detenerse en lo que debía ser su cuello. Ella volvió a poner sus manos sobre aquel metal con filo que atravesaba su cuello, el dolor se hacía insoportable mientras todo volvía a sumirse en la oscuridad.

Cayó en un profundo sueño. Se vio a si misma salir de su cuerpo, totalmente deformado. La sangre corría por su rostro y se mezclaba con sus lágrimas, su piel tenía un tinte azulado y uno de sus ojos no se encontraba en su lugar. Frente a ella se encontraba su amado gritando su nombre, de rodillas con su ropa cubierta de sangre, la cual no parecía ser suya.

"Tú no puedes estar aquí, esto es solo un sueño" – Murmuraba Lee Know en su cama - "Estás muerta" – Gritó y cerró sus ojos con fuerza. Su piel pálida se iluminaba con la luz de la luna y podía distinguirse el sudor que cubría su cuerpo.

"Por favor, ya no puedo más" – Lee Know repitió una y otra vez, aun sintiendo el peso de alguien acostado a su lado. – "Aún te amo, pero debes dejarme vivir. Prometo que nos volveremos a encontrar"

"The love you gave me still remains
That's how I have the strength to live
You don't cry
Only say hello when we meet again, never cry
The story we created will remain like this" – Cantó Minho de forma suave, como si se tratara de una canción para dormir.

Ella, al escuchar su voz angustiada, lo entendió. - "Te amo" – Dijo por última vez y todo se desvaneció.

...

Despertó agitada en medio de la noche, podía sentir su corazón latir acelerado y el aroma de su amado a su alrededor. "Otra vez el mismo sueño" – Murmuró mientras buscaba con su mirada al amor de su vida.

"Creo que esto nunca terminará" 

It's not Over (Lee Know)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora