jungkook y taehyung están en el equipo de basquetbol de la escuela.
jungkook es abiertamente gay y los manoseos de equipo en las duchas le encantan.
taehyung es gay sólo para y por jungkook, aunque nadie puede saberlo (ni siquiera él mismo) y odia l...
El pelinegro frunció ligeramente el ceño al sentir su celular vibrar como loco en su bolsillo trasero, viendo los mensajes de su novio, al leerlos le parecía algo extraño que el menor le preguntara a él, debía decirle a su madre, si todavía vivían en la casa de sus progenitores.
Papi 👅💦
Googie, deberías pedirle permiso a tu madre, no a míPero por mí claro, quédatelo.
✨💜Mí Jungkookie💜✨
Nono Quiero que sea de ambos Quiero que tengamos una mascota juntos
Taehyung tragó duro y comenzó a sudar frío, sus mejillas enrrojecieron.
Papi👅💦
Jimin, es muy pronto para tener una mascota juntos.
✨💜Mí Jungkookie💜✨
Taehyung, vamossss No puedo dejarlo morir Y yo solito no puedo mantenerlo 😢😢😢 Es muy pequeñooo
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Si no lo adoptamos lloraré ☹️
Ese pequeño era manipulador y sabía su punto débil.
Daddy 👅💦
Lo hablamos en casa
Guardó el celular en su bolsillo antes de ver los mensajes de emoción y con muchos emojis que su novio seguramente había mandado.
Jungkook no estaba en la escuela así que volvió sólo en la moto, llegó a su casa y se encontró a su novio con una sonrisa digna del niño más feliz del mundo y en sus brazos una caja, a la cual ya desde lejos Taehyung miró con el ceño fruncido.
— ¡Mira, Hyung! —. Jungkook se le acercó con la cajita en manos, mostrando el peludo animalito de pelaje rubio claro y blanco por partes. —Es un trigecito, como usted.
Taehyung frunció la nariz con desaprobación.
— Jungkook, soy más de los perros, lo siento.
Jungkook rodó los ojos y suspiró de forma dramática.
— Lo mismo decías de las vaginas y mírate, ahora andas comiéndome la polla.
— ¡Jungkook!
— ¡Taehyung! —. Imitó el rubio. —No voy a dejarlo... Es pequeño y es muy bebé, no puedo dejarlo.
— No tendrías que ni haberlo agarrado.
— Con solo verlo ya me lo hubiera llevado, Hyung —. Dijo el menor. —No voy a dejarlo por más veces que lo diga, así que lo acepta o me voy a ofender muchísimo y no voy a volver a hablarle—. Le hizo un puchero.
