El Canto Del Fénix (Jenlisa) || COMPLETO

Capitulo 19: Ecos del Pasado II

Manoban Camp 1820

Tal como Bridget la había amenazado, Lalisa no salió de cama al día siguiente y fue Bridget quien salió a los campos muy de madrugada para revisar la cebada, así fue durante un par de días más, Roseanne le fue de mucha ayuda al hablarle del manejo del lugar, aunque ella aún sin saber mucho del negocio de la cebada lo había hecho de maravilla, dicho por la misma Roseanne.

A pesar de la quejas de Lalisa, ésta se vio confinada a su habitación, el doctor Nevon le impidió salir de cama por dos o tres días, aunque amenazó con extender su orden a una semana más si Lalisa se seguía negando a beber las infusiones que le había recetado, Bridget prometió que de su cuenta correría que Lalisa tomaría sus medicinas, luego el doctor se fue.

Como Lady Bridget prometió, luego de ese día y no sin una discusión apocalíptica previa, Lalisa tomó todas y cada una de sus medicinas, cosa que la señora Sinclair le agradeció en silencio como era natural en esa casa, pero para la cena una tarta de frutos del bosque la esperaba como agradecimiento.

Luego de darse un baño, Bridget bajó a recibir a Roseanne que había estado fuera para resolver algunos asuntos de impuestos de la finca.

Ambas revisaron las cuentas de Manoban Camp, para sorpresa de la rubia, la esposa de su amiga se las había podido arreglar bastante bien en esos días, cosa que Roseanne no dejó pasar por alto. Sabía que incluso su amada Isabella no podría manejarse tan bien con las cuentas, y eso que su finca era por mucho más pequeña que ésta.

Cuando Bridget se quedó callada, la rubia supo que algo no andaba nada bien.

-¿Ocurre algo, Bridget?

-Lady Roseanne... Usted me dijo que conoce a Lalisa de hace años, ¿verdad?

-Si, desde niñas -. Responde la rubia sospechando lo que viene después.

-Conociste a la madre de Lalisa.

-Si, su madre y la mía fueron amigas. Parece casi como un decreto que las señoras de ambas Casas se llevaran muy bien. Siempre fue así y algo me dice que siempre será así.

-¿Lo crees?

-Si, en definitiva. Mi abuela y la de Lalisa se agradaban mucho. Es como una cadena de mejores amigas.

-Bueno, yo de lo que quería preguntarte era de la infancia de Lalisa. ¿Cómo fue de pequeña? ¿Siempre fue así de... especial?

Un silencio de la rubia que meditó sus palabras para luego decir.

-Bridget, luego de lo que ella vivió... me sorprende que no sea peor.

-¿Qué pasó? ¿Por qué tanto misterio alrededor del pasado de ella?

-Lady Bridget, todo eso es algo que usted tendrá que preguntarle a Lady Manoban. Su pasado es muy delicado, y ella es la única que tiene el derecho de contarlo, por que sólo a ella le pertenece. Sólo puedo decirle que luego de... La ausencia de su madre, Lalisa tuvo la infancia más cruel y miserable, que cualquier chico pudo tener. Sir Duncan no le tenía compasión.

-Sin formalidades. Sólo llámame "Bridget"

La rubia asiente

-Lalisa cuenta que a tu madre le debe mucho.

-No hizo más de lo que cualquier mujer haría por una pequeña niña que es dejada a su suerte.

-No cualquiera, tu madre le dio cariño cuando nadie más lo hizo-, explica Bridget -eso salvo la poca humanidad que le quedaba a Lalisa.

-Créeme, Bridget. Si tu hubieras visto como trataba Sir Duncan a Lisa... como la veía... entenderías

-Quiero entender