La perla azul -Kessia. M-

La perla azul

Capitilo 1._

Una niña de unos 9 años paseaba por la playa recolectando conchas como solia hacer cada mañana despues de desayunar.

La niña siempre llevaba puesto un bestido color celeste claro, y un liston en forma de lazo, color celeste oscuro.

Aquella niña vivia sola, con sus abuelos, sus padres habian muerto ya hace dos años atras, mientras pescaban en su barco, una ola inmensa los tomo por sorpresa y undio el barco junto con ellos adentro, los padres por mas que trataban de escapar del barco, no podian y murieron ahogados.

Despues de algunos dias, los guardias la costa, encontraron los cuerpos de los padres de la niña, flotando en la orilla del mar, los guardias informaron a los abuelos y les entegraron los cuerpos hechos cenisas.

Como funeral, los abuelos, jinto a su nieta, hecharon las cenisas al mar. Despues que los padres de la niña murieran, sus abuelos se hicieron cargo de la pequeña niña de 7 años que se habia quedado huerfana.

Despues del funeral, los ancianos le habian explicado con mucha delicadesa a su nieta, que sus padres ya no estaban con ellos y que no iban a poder regresar jamás, pero que siempre estaran en su corazon y que si los queria ver, podia mirar las estrellas y que ahí los encontraria.

Despues de la muerte de sus padres, la niña todas las noches salia de su pequeña casa de playa, a ver el cielo lleno de estrellas, ella se imaginaba que entre esas estrellas, estaban sus padres y se alegraba por ver cuanto brillaban entre el cielo oscuro.

Volviendo al presente, la niña actualmente tiene 9 años, es muy curiosa como cualquier niño, esta mañana como de costumbre tomo su pequeño bolso (que le havia tejido su abuela), para recojer las conchas mas bonitas que se encontrara.

Todas las conchillas que ella recolectaba las usaba como decoración para la casa, como sus padres ya no estaban con ella y no tenia con quien jugar, decidio recojer conchas para no aburrirse tanto, claro que aún tenia a sus abuelos para jugar con ella, pero los ancianos ya estaban muy abansados de edad y ya no podian caminar como normalmente lo hacian antes, sus pasos se hacian cada vez más lentos, al pasar el tiempo.

Mientras la niña paseaba por la orilla del mar, recojia la mayor cantidad de conchas, entre aquellas conchas vio como algo brilla, aparto las demas conchas y la rena para ver que era lo que billaba tanto, despues de urgar bien en la arena encontro una perla azul, que con la luz del sol, brillaba como un diamante.

De inmediato la niña regreso a casa corriendo de la emoción y se las mostro a sus abuelos.

-Abue, abue!!, mira lo que encontre!!! –gritaba la niña entrando a la casa–

-Clara, querida, no grites despertaras a tu abuelo –le decia su abuela tratando de calmar a la niña–

-Perdón abuela –respondio cabisbaja‐ pero, mira lo que encontre!! –esclamo la pequeña–

-Deja ponerme mis lentes –decia su abuela mientras, se colocaba– baya, pero si es una perla, que hermosa

-Si y es azul como tu cabello –comento inocentemente–

-No clara, no te equiboques, mi cabello es blanco, no es azul –le corregia con cariño, su abuela–

-Bueno, pero se parece mucjo a tu cabello –dijo riendose–

-Niña trabieza, mejor ve a lavarte las manos, para que me ayudes con la comida, si?

-Si, abue, ya vuelvo!!! –gritaba, mientras corria hacia el baño–

La niña a pesar de ser pequeña, le ayudaba en los queaceres a su abuela y tambien habia aprendido a preparar algunos platos sencillos, ella no lo sabia, pero su abuela le enseñaba todas esas cosas, para que se pueda cuidarse ella sola, para cuando ellos ya no esten.

La anciana sabia que ya no le quedaba mucho tiempo en el mundo y que pronto se marcharia al igual que sus padres.

-Listo abu, ya me lave muuuy bien  –decia la niña mostrando sus manos a su abuela–

-Que limpias estan, –le felicitaba su abuela– bueno comienza cortando los vejetales, yo pelare el pescado, pero recuerda...

-Colocar los dedos en forma de "C" , lo se abu siempre me lo recuerdas –le contesto la niña–

-Lo has aprendido muy bien, asi nunca te cortaras

-Si –contesyo la niña, mostrandole una gran sonrisa–

Despues de unos minutos.
-Mira abue, ya las corte todas, la cebolla, el pimiento y

-El toma, muy bien hecho, te estas haciendo muy experta en cocina, mi pequeña clarita –le decia su abuela abrazandola–

-Te ayudo prendiendo la estufa? –pregunto la niña–

-Si, por favor –le contesto su abuela, con voz dulce–

Fin del primer capitulo

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