Los gritos, quejidos, angustiantes sollozos y uno que otro sonido húmedo y grotesco brotaban de la amplia pantalla del televisor. La escena macabra de la película se reflejaba en los desinteresados orbes chocolates de Seokjin, mientras que los ojos avellana del rubio a su lado, Jungkook, su mejor amigo, reflejaban el shock que su cabeza procesaba por la cantidad de sangre esparcida en el pasto verdoso del bosque donde se desarrollaba la trama.
En medio de un jadeo, Jungkook lleva otra palomita de maíz a sus regordetes belfos hormigueando por el picor del ají y limón, aunque la sensación pasaba a segundo plano gracias al nudo en su estómago, su mirada no se despegaba de la televisión, simplemente no podía dejar de mirar con horror cómo los personajes de la película continuaban gritando y tratando de escapar del fantasma que estaba despedazándolos en el aire.
Su nariz se arruga al presenciar las tripas caer tal lluvia al suelo, y da un brinco en su lugar al escuchar la risa sarcástica de Seokjin, el mismo que le roba una palomita picante antes de comentar, con la boca llena.
"¡Já! Por favor, lo partió en dos, ¡Y sólo salieron las tripas!, ¿Quién quiere ver un mísero intestino? ¡Que salgan sus jugos gástricos, quiero ver esos fluidos!" Maldice entre dientes, masticando con brusquedad el alimento crujiente y esponjoso a la vez.
Jungkook se encoge en su lado del sofá, la manta en su regazo se desliza hasta sus muslos cuando se acomoda, cruzando las piernas, inquieto.
"No jodas, Jinnie. Llego a ver un estómago sumándose a la escena y me mearé encima" Era un chiste, pero no sonó como tal. No estaba asustado, sólo tremendamente ansioso. Sus propios jugos gástricos se revolvieron ante la turbia idea de su mejor amigo.
Nuevamente, Seokjin se carcajeó, y tras robarle otra palomita de maíz, se bajó del sofá para arrodillarse frente a un paliducho y sudado Jungkook, cruzando los brazos sobre sus rodillas, molestándole al pellizcar su dedo pulgar del pie por sobre la mullida manta en sus piernas.
"No estás sudando por el ají, eso lo sé. Te encantan estas cosas" La malicia palpable en sus palabras, pues tenía claro lo acojonado que el rubio se encontraba, por más que este haya superado las dos películas de terror anteriores, ya llegaba a su límite al ver las explícitas muertes de cada personaje.
"¡Claro que es por el ají!" Chilla una queja en respuesta, removiéndose en el sofá hasta que su cuerpo se deslizara hacia abajo y así los cabellos marrones revueltos de Seokjin le quitaran la espantosa vista del fantasma en la pantalla.
No sabía si resistiría el maratón completo, a penas llevaban tres de las diez películas que Seokjin había seleccionado para la noche.
Ambos se llevan una palomita a la boca, Seokjin le observa con los ojos entrecerrados, sospechando seriamente en si deberían parar.
"Estás tan pálido que pareces uno de esos cadáveres" Emite una ruidosa carcajada, jugueteando con los dedos fríos y gorditos ajenos. "Venga, termina esta y vemos la que tú querías, tres son suficientes"
Sin embargo, Jungkook se apresura a negar, los ojos abiertos de par en par ante los agudos gritos de pánico de la chica que tiene al fantasma estampándole el rostro una y otra vez contra un frondoso roble, el mismo que decoraba el bonito jardín que tan tranquilo se veía al principio de la película.
"Yo puedo ver las diez..." Susurra en un hilo de voz, igual de terco como las veinte veces que Seokjin le había sugerido parar.
Kim sabía, sabía muy bien que probablemente Jungkook no podría pegar ojo en el resto de la noche, y que ver las siete películas restantes era una tortura para su amigo vainilla. Pero, ¿Qué otra cosa podía hacer? Conocía al chiquillo desde los pañales, y Jungkook era tan terco como una mula.

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the window : taekook
Fanfictionsé un buen angelito y cierra la ventana de tu habitación, jungkook. ㅤㅤㅤ ﹕ capítulo único ! ㅤㅤㅤ ﹕ tae demonio ა koo humano ㅤㅤㅤ ﹕ status : completo ㅤㅤㅤ ﹕ obra original de wingsofabaepsae © adaptación autorizada. prohibida la modificación, adaptació...