Lo que tú querías (Chara angst) || UNDERTALE ONE-SHOT

Capítulo único

Chara había enfermado y estaba todo mal, los medicamentos parecían no darle efecto o al menos solo aliviarlos pero no curarlo y esto estaba preocupando a T/N. A veces de la preocupación se le escapaba alguna lágrima o llanto, pero Asriel siempre venía a apoyarla, aunque los dos terminaran llorando.

 Ambos sabían acerca del plan de Chara y les dolería verlo sacrificarse por conseguir destruir la barrera que los mantenía atrapados.

Mientras que Toriel lloraba por su hijo adoptivo al cual quería como si fuera de su sangre; Asgore estaba sufriendo en silencio por su Chara.

Chara no iba a recuperarse, simplemente no lo haría.

Te levantaste sobre las 7 de la tarde después de haber dormido un poco. La noche anterior te pusiste tan sentimental con Chara que acabaste llorando y... casi no te dejó dormir. Fuiste a su cuarto compartido con Asriel (tú eras un poco más mayor que ellos así que tenías un cuarto propio además de porque eras la única chica de la casa aparte de Toriel), y los encontraste hablando, pudiste ser testigo del último deseo de Chara.

─ Desearía... Ver las flores doradas de mi aldea por última vez. ─ Se le notaba débil en su dulce voz.

Él había sido la persona más dulce desde que cayó al subsuelo. Había hecho migas con todo monstruo que había encontrado, siempre preocupó mucho por todos, cuando te enfermabas era el primero en venir, la segunda Toriel seguido de Asriel y Asgore.

El día siguiente...

Chara ya no respiraba, era como una apuñalada en el corazón saber que él ya no estaba entre nosotros.

Todos lloraron ese día, el subsuelo perdió total esperanza y Asriel atravesó la barrera para terminar muriendo junto a su querido hermano, no pudiste contener tus lágrimas. Asriel había cumplido el deseo de Chara pero al coste de su propia vida, desde ese día algo se partió dentro de ti y decidiste quedarte en el castillo de Asgore, por más que te doliera su cruel decisión acerca de todos los demás humanos que bajaran pero solo había una razón en especial para seguir junto a ese peludo amigo al que llamabas papá.

Flores doradas empezaron a florecer después de la muerte de Asriel en el castillo real.

La primera flor que floreció en el jardín se la llevó Alphys para hacer experimentos con él. A pesar de eso era lo único que quedaba de ellos, a veces desearías que se hubieran quedado más tiempo viéndote crecer junto a ellos, pero... No iban a regresar por nada y lo sabías perfectamente. Tú eras consciente de eso y a veces tenías pesadillas sobre eso.

Tus pesadillas iniciaban bien pero cada vez eran más perturbadoras con muertes más grotescas en cada sueño y eso te frustraba, mucho de hecho. Saber que ya no estarían allí para ti, nunca más.

Cada cierto tiempo un nuevo humano aparecía y moría a manos de Asgore, tu eras su excepción ya que aún te veía como una hija. Pasaron los años y ya eras una adolescente hecha y derecha testigo de los crímenes de Asgore contra los humanos, sinceramente no habías sido torturada por los humanos como Chara al caer, ya que el intento de Chara fue el de suicidio.

El milagroso día llegó donde Frisk llegó a salvar a monstruos y humanos ese mismo día. Al llegar a la superficie después de una gran reunión con todos sus nuevos amigos que eran los mismos que Chara, se sentía por una vez como en casa, después de tanto tiempo sola y triste, Frisk, una humana de buen corazón pareció caer del cielo para ser la salvadora de este pueblo. Te preguntaste ese día, si eso es lo que hubiera querido Chara con su plan. Liberar a todos y ser felices por siempre.

Te encontrabas de nuevo en el jardín real mirando las flores que se encontraban en ese lugar.

─ ¿Chara, esto es lo que has estado esperando todo este tiempo?, ¿Un lugar feliz donde jugar y poder intentarlo otra vez? Ahora entiendo todo. Chara, tu nunca fuiste malo con los humanos, solo querías justicia por todo lo malo que te había ocurrido en aquel cruel y terrible mundo. ─