Capítulo 44. Perfecto.

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Alec mantuvo su distancia y silencio dos días enteros. Me ignoraba en clases, y ni siquiera los mensajes de texto que tenían que ver con la escuela lo hacían contestarme ¿lo había asustado? ¿huía porque no quería nada conmigo y no sabía cómo decírmelo?

El jueves, Alec ni siquiera fue a la primera clase. Era su primera falta en todo el semestre. Lo vi entrando al salón de la segunda clase, llegó tarde, pero los profesores lo amaban, lo dejaron entrar sin problema.

-Ey ¿todo bien? -Susurré cuando pasó a mi lado. Asintió sin siquiera mirarme. Se fue a sentar en la parte de atrás. Ángelo pareció cuestionarlo, pero Alec no quiso ni mirarlo. Hice una mueca.

-Algo anda raro con Alec. -Le susurré a Dylan que se sentaba tras de mí. Ella negó.

-No te preocupes. -Me dijo bajo.

-Lo asusté, no me ha hablado en dos días, no me mira, ya ni quiere venir a clases. -Le susurré haciéndola reír.

-Quizás es algo personal. -Me dijo ella. Y con eso, yo pensé en la única vez que Alec había faltado a la escuela pública. Cuando a Rose recién le habían detectado el cáncer ¿ella estaba bien?

Cuando la clase terminó, me apuré a correr a Alec que seguía en su lugar guardando su iPad en la mochila.

-Hey hola. -Lo saludé. Elevó los tristes ojos azules a mí.

-Emi. -Saludó.

-Ah ¿todo bien con Rose? -Fui al grano. Me vio confundido.

-¿mamá? ¿Qué con ella?

-¿todo bien?

-¿Creo?

-Ah genial. -Dije de pronto un tanto avergonzada. Él sonrió un poco.

-Gracias por preocuparte por ella. -Dijo poniéndose en pie para echarse la negra mochila a la espalda.
-Te veo en la siguiente clase...

-Alec. -Lo detuve por la muñeca. Me vio confundido. -¿Qué pasa? Estás evasivo y callado, y... creo que triste ¿Está todo bien? -Preguntaba yo. Él dio un suspiro.

-Tuve una...una mañana difícil.

-¿por tus padres? -Supuse yo al recordar que había dicho que pelearon.

-Eh no, sólo...son mis cosas eh ¿Sabes? No quiero hablar. Tengo...debo ir a buscar a alguien. -Dijo él.

-¿A alguien? -Pregunté segura de que ese había sido un mal pretexto evasivo. Me asintió y se dio la vuelta. Y claro que no se fue a buscar a nadie, lo vi irse al pasillo de su casillero. Sólo me estaba evadiendo. 

Y durante la hora del almuerzo, Alec desapareció, así que, para la siguiente clase, fui yo la que llegó tarde para asegurarme de sentarme a su lado, pero los lugares al lado de Alec en la parte de atrás del salón ya estaban ocupados.

-Siéntate con Dylan. -Le pedí a Ángelo que se sentaba al lado de Alec. Me vio confundido. Miró a Alec, quien hizo una pequeña mueca.

-Uhm...en realidad...quizás es...buena idea...-Dijo Ángelo levantando su mochila azul marino lentamente. Se fue a sentar a mi lugar en la parte de enfrente. Dylan de inmediato lo abrazó desde atrás dándole un beso en la mejilla por lo que Ángelo sonrió y puso sus manos en los brazos de ella. Parecía que iban a estar cómodos, así que me apuré a sentar al lado de Alec. Dejé mi mochila en el suelo.

-Lamento lo que dije en tu casa. -Le dije inmediatamente. Me vio confundido. -Sobre...sobre tú y yo, claramente no estás de acuerdo, y entiendo, pero no quiero que me evadas todo el tiempo. -Fui directa. Él dio un suspiro. Negó un poco.

Mi Vida de Cristal (#4 Saga Cristal FINAL)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora