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Un pelinegro de mejillas abultadas llega al colegio, es su primer día en esta escuela y todo es tan nuevo que comienza a rascarse una mano y lo hace tan fuerte que va dejando esa zona roja, sufre de ansiedad y siente que hasta una mirada lo hace ser el centro se atención

Va directo a su aula, iba tan ensimismado en querer llegar que no se dio cuenta que alguien venía en dirección contraria y terminó chocando con esa persona, eso hizo que todos miren a Jimin

—fíjate por donde andas— le dijo un castaño con un rostro serio y la voz neutra

Jimin había jurado que su corazón había latido por primera vez tan fuerte, y no era para menos, había conocido al hombre más hermoso sobre la faz de la tierra y solo bastó esa vez para que en su mente solo esté la imagen de ese castaño

Jimin ingresa al aula que le indicaron y no podía tener más suerte, ahí, en el fondo estaba la persona que tenía en su mente 

—h-ola— saludó en vano porque el castaño no le respondió y solo siguió haciendo lo que estaba haciendo en su cuaderno. Jimin se sentó a su lado y comenzaron las murmuraciones, así que Jimin comenzó a frotar sus manos y rascarse con el fin de no escuchar lo que murmuraban

—haces mucho ruido, si quieres seguir haciendo eso vete a otro lugar— dijo con el mismo tono frío aquel castaño

Esa fue la primera vez que lo conoció y durante un mes no dejó de seguir al castaño y estaba atento a todo lo que hacía, sabía a detalle todo lo que hacía a cada hora

—llevas 33 días, 2 horas con 13 minutos y... 10 segundos vigilandome, seria bueno que realmente sepas hacerlo porque así no me sentiría vigilado todo el tiempo por ti— y el castaño tenia razón porque Jimin estaba detrás de unos arbustos viendo al castaño —puedes quedarte ahí, pero ya deja de hacer eso que me cansa— aquel castaño causaba mucha curiosidad en Jimin y es que pocas veces era la que hablaba y si lo hacia siempre era en ese mismo tono de voz pausado y neutro, las expresiones faciales que hacía eran las mismas todos los días y la rutina era exactamente la misma todos los días y por horas

Jimin tenía contadas las veces que el castaño le había hablado, y habían sido 5 veces y en todas esas veces solo habían sido para regañarlo y Jimin sabía que sentía algo por aquel castaño que siempre hacía latir su corazón

¿Por qué siempre hace lo mismo?

Se preguntaba Jimin, pero Jimin tampoco era muy diferente porque tenía sus propias obsesiones, solo que Jimin sí sabía expresar lo que sentía

Jimin había sabido por los profesores que aquel castaño se llamaba Jeon Jungkook y es que era constantemente llamado por los profesores que ya lo conocían para que participe en clases, pero siempre era lo mismo y el castaño se quedaba en su sitio viendo fijamente a los profesores y no moviéndose ni un solo centímetro

Jimin quería conocer más a Jungkook, solo que Jungkook nunca respondió a lo que le preguntaba y Jimin se ponía triste haciendo pucheros. Ambos eran los excluidos del grupo, a ninguno de los dos nadie les hablaba porque eran caso perdido, Jungkook nunca respondía y Jimin hablaba incoherencias o tartamudeaba cuando muchos le hablaban


***



Jimin había descubierto que Jungkook iba todos los días a la enfermería de la secundaria, pero no era porque estuviese enfermo, sino que como en la secundaria no había presupuesto para un médico, era Jungkook quien se encargaba de atender a los que se sentía mal físicamente

A Jimin se le ocurrió la increíble idea de hacerse un corte en el antebrazo, solo quería acercarse a Jungkook y esa era su mejor manera de obtener su atención

—pase— dice Jungkook detrás de un escritorio con su bata blanca y debajo de la bata esta su uniforme de secundaria

Jimin ingresa y muestra su brazo, Jungkook levanta la vista y con la mirada le indica que se siente en la camilla, Jimin se sienta y Jungkook toma un lapicero y comienza a escribir rellenando un formulario, se levanta y de un botiquín saca agua oxigenada, vendas y algodón

Se acerca hasta donde esta Jimin y toma el brazo pasando un pequeño trapo con agua oxigenada para limpiar el brazo ensangrentado de Jimin al que parecía no dolerle y sonreía al ver al castaño atendiendo su herida

Jungkook toma algodón y lo pone en la herida a Jimin y lo trata sin delicadeza alguna y eso le saca un pequeño quejido a Jimin, pone la venda y antes de soltar el brazo coloca su mano encima del vendaje y aprieta esa zona haciendo fruncir el ceño a Jimin y se queja

—si no quieres sufrir más dolor evita cortarte, pero si quieres hacerlo de verdad sigue cortandote y muere desangrado y para que mueras no vengas aquí para buscar salvación— le dice Jungkook matando la emoción que había sentido Jimin pensando que Jungkook se preocupaba por él —pon tu nombre en el registro y lárgate de aquí— Jimin se sentía triste e igual puso su nombre en el papel

—gracias Jungkookie— dijo Jimin y salio de ahí —parece que no me quiere... estoy muy triste, necesito encerrarme y meterme a mi cama— al llegar a casa eso fue lo primero que hizo

—Jimin, ¿estas bien?— pregunta su madre muy preocupada, es que Jimin no había dejado de llorar desde que había llegado

—nada madre, no me pasa nada, mejor ve a descansar— le dice con una voz nasal, él nunca podía contar con su madre que siempre andaba dormida por tomar pastillas para dormir por la depresión que tenía desde que el maldito de su padre decidió abandonar a su madre por otra mujer







***

Jimin tenía un cutter en las manos, esta vez no pensaba cortarse para ver al castaño, sino que se cortaba solo para eliminar el dolor que sentía al pensar en lo horrible que era su vida, desde que su padre lo abandonó a los 7 años no volvió a tener madre porque ella se había sumergido en una gran depresión y varias veces ella había intentado suicidarse, de lo único que vivían era del dinero que la madre de Jimin tenía producto de la herencia que le había dejado su abuela

Se corta sientiendo satisfacción y unas lágrimas caen por su rostro, una gran sonrisa hace su divina aparición en su rostro y se hace otro corte, y un tercero más. Se sienta en el suelo y deja que la sangre siga su recorrido y siga saliendo, su mirada se va haciendo borrosa, pero no pierde su sonrisa de paz. Estaba casi inconsciente, solo sintió que su cuerpo era cargado por unos fuertes brazos, y por un momento se sintió como si estuviera en el cielo porque estaba viendo la cara de un ángel, veía la cara de Jungkook

Recuestan en la cama a Jimin y le hacen presión en las zonas de donde sale sangre, le quitan la sangre que había manchado su brazo y luego le ponen algodón con una venda, y también le ponen un suero para que se vaya recuperando

—si querías morir no tenías que aparecer delante de mi, si quieres morir mejor hazlo en un lugar en donde nadie te pueda encontrar— le dice Jungkook volviendo a llenar un formulario, si había algo que nunca de olvidaba es el hacer los procedimientos correctamente, era un obsesionado con el orden











*Que oscuro que esta esto, hace tiempo quería hablar sobre trastornos, pero tenía que prepararme porque son temas serios que no se pueden hablar tan a la ligera y necesitan de mucha compresión

Siempre hay una razón detrás de algo, y no todos podemos descubrir ello*

Zhaochu


NUESTROS OSCUROS MUNDOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora