Matt se escondía detrás de sus libros
y su mirada perdida.Matt vivía,
pero no sentía.Sus cortes en las muñecas eran su consuelo y aquel 3 de abril,
Matt se convirtió en polvo.Justo como cada cigarrillo quemado y cada sueño frustrado.
Matt se escondía detrás de sus libros
y su mirada perdida.Matt vivía,
pero no sentía.Sus cortes en las muñecas eran su consuelo y aquel 3 de abril,
Matt se convirtió en polvo.Justo como cada cigarrillo quemado y cada sueño frustrado.