Cantarella

Reencuentro

Cambiare varias cosas, no será 100% fiel al vídeo, ya que hay varios vídeos distintos de esta canción, la letra es lo que importa y los vídeos no influyen :3

Narra Kyojuro

Estaba sentado junto a la ventana esperando, supe que el llegaría pronto junto a su pequeña hermana, por alguna razón ese hecho me lleno de anciedad, dejamos de vernos hace años, cuando aún éramos niños y de pronto... ¿Venía de visita?, Escuché que sus padres murieron en un terrible accidente, pero, acaso ¿Era esa la razón por la que el estaba aquí?... El tic tac del reloj me estaba volviendo loco a cada segundo, intenté (sin éxito) leer algún libro para distraer mi mente, pero fue en vano, solo podía pensar en volver a ver esa dulce sonrisa en su rostro, esa sonrisa que hace años me fue arrebatada y que esperaba con ansias ver de nuevo.

Mientras trataba una vez más  de concentrarme en mi lectura escuché un carruaje acercándose, el sonido de los caballos relinchar llenaba mis oídos, habían llegado... Separé mi vista del libro y pose mi vista en aquel carruaje... Pasaron algunos segundos que se sintieron como horas y entonces lo ví...

Bajo del carruaje y miro la mansión con una sonrisa nostálgica, el viento acariciaba sus cabellos color carmín, yo solo podía contemplarlo a la distancia, tratando de disimular mi emoción, es decir, no era apropiado de un "caballero" mostrar ese tipo de emoción... ¿En qué momento me convertí en mi padre? ¿En qué momento la llama de mi corazón se apagó?...

Me quedé en mi despacho a arreglar los últimos detalles de mi trabajo, como heredero de la fortuna, estoy obligado a hacerme cargo de que los negocios marchen bien (esto está ambientado en tiempo antiguo, así que solo digamos "negocios" v:) en cuanto termine salí a recibir a mis invitados, los hermanos Kamado, que venían acercándose justo cuando iba saliendo y cerrando la puerta tras de mi y acomodando mis guantes para retomar esa apariencia sería y fría que tanto odio y tanto se ah apoderado de mi estos años.

Narro yo mera v:

Tanjiro Kamado era un chicho atractivo y dulce, con su cabello y ojos color carmín, una dulce sonrisa y una peculiar cicatriz en su frente que para nada le quitaba el atractivo, tenía nueve años la última vez que vio a Kyojuro, ahora tenía 18 años y mentiría si dijera que no estaba sorprendido al ver a Kyojuro tan serio, incluso estaba un poco asustado por su actitud, sin embargo, eso no le impedía regalarle una cálida y sincera sonrisa a su viejo... ¿Amigo?

Tanjiro: Gracias por recibirnos, Rengoku-san, espero no haber causado molestias- dijo con un tono suave mientras sonreía y daba una ligera reverencia

Kyojuro: No te preocupes, no causan ninguna molestia, sean bienvenidos y sientanse como en casa -dijo en un tono serio aunque en el fondo se encontraba muy feliz -y puedes llamarme Kyojuro

-escuche que perdiste a tu madre a causa de esa extraña enfermedad, lo siento mucho... -dijo en tono triste y melancólico ya que conoció a Ruka, una mujer con un carácter fuerte pero amable

De pronto la mirada de Kyojuro transmitía tristeza, el amaba a su madre y la vida había sido dura sin ella, para el y su pequeño hermano, su padre nunca fue un hombre muy cariñoso o tolerante, pero perder a Ruka parecía haberlo destruido por completo.

Kyojuro:... Gracias, lamento lo de sus padres también...-lo dijo en un tono triste que no pudo ocultar

Tanjiro: Gracias... Oh! Nezuko, ¿Por qué no saludas a Ren... digo, Kyojuro?- dijo un poco nervioso, mirando a su hermana quien estaba parada tras el, después de la muerte de sus padres ella se había vuelto algo tímida e insegura y ciertamente la seriedad de Kyojuro pondría nervioso a cualquiera.

Nezuko:... H-hola, Rengoku-san, gracias por dejarnos quedar aquí... -dijo un tanto nerviosa y tratando de no mirar a los ojos a Kyojuro.

Ciertamente Kyojuro había cambiado mucho, ya no era el mismo chico de 14 años que conoció, ahora era un hombre de 23 años, alto, de melena rubia con puntas rojas la cual llevaba amarrada en una media coleta alta, con unas pobladas cejas que solo enmarcaban sus bellos ojos amarillos con rojo, que asemejaban mucho al atardecer (el atardecer se queda pendejo, okay ya v:) solo hacía falta esa bella sonrisa que alguna vez tuvo y tanjiro anciana ver de nuevo algún día, aunque en el fondo, el no había podido cambiar del todo.

Kyojuro: Hola Nezuko, espero que estés cómoda, se que te gustan las flores, así que puedes visitar el jardín cuando quieras, se que te encantara-dijo amablemente aunque aún con su tono serio

Nezuko miro a Kyojuro con una sonrisa y asintió felizmente, el les dijo que podían ir a sus habitaciones a acomodar sus cosas y más tarde cenarian todos juntos, ya que Senjuro estaba ocupado con sus lecciones privadas y se desocuparia más tarde, los hermanos estuvieron de acuerdo y se despidieron para seguir cada quién su camino, Kyojuro se recargo en una pared un momento, desde que vio de frente al chico, algo en su pecho se encendió, ¿Acaso ese sentimiento volvía a invadir su pecho? O más bien ¿Será que nunca se fue?

Continuará...

Ya se, mucho texto v: pero esto no lo leerá ni cristo así que no importa v: