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La semana de exámenes finalmente llegó y aunque las cosas no resultaron de la forma esperada para Taehyung, luego de compartir parte de sus preocupaciones con Seokjin le fue más sencillo concentrarse en sus estudios y recuperar esa agradable sensación de confianza que solía tener siempre para las actividades de la escuela.

Estaba listo para iniciar con esa evaluación de cálculo frente a él, tenía un buen presentimiento sobre el día y creía firmemente que era capaz de obtener una calificación perfecta. Casi pudo saborear la gratificación de ser el mejor de la clase y quitarle a su madre cualquier razón para lanzarle un insulto o castigarlo de nuevo. Todo sería perfecto porque Taehyung estaba enfocado en el examen y no en el hecho de que la silla de Jungkook permanecía vacía.

Se deshizo de la idea tan rápido como llegó a su mente, porque permitirse pensar en Jungkook lo haría perder todo el enfoque que se esforzó por conseguir durante la semana. Volvió la vista a la hoja sobre su escritorio y esperó ansioso a que el profesor Wang diera la orden para iniciar el examen.

Faltaba un minuto para las 7am y dio un último vistazo a ese lugar en particular del salón sólo para confirmar nuevamente que él no estaba allí y alejarse de falsas ilusiones, pero casi pierde la respiración al darse cuenta de que la silla que permaneció vacía por dos eternas semanas, ya no lo estaba más.

—Justo a tiempo, joven Jeon. —vociferó el profesor Wang.

Taehyung tuvo una pequeña crisis al notar a Jungkook acomodándose en su respectivo escritorio. 

Jungkook no lo observó de vuelta, pero casi podía apostar a que él sabía que lo miraba. No deseaba hacerlo, no cuando el tiempo para desarrollar la evaluación había comenzado y en lugar de resolverla estaba completamente absorto en el indiferente azabache que movía su lápiz con una elegancia insoportable.

Se hizo a la idea de que Jungkook no regresaría a Seúl porque después de esa desastrosa llamada no obtuvo más información de él. Al ver que no regresó a clases ni mucho menos a las sesiones de estudio, fue fácil suponer que pediría una transferencia a su antigua escuela en Busan. No obstante, las cosas no resultaron así; él estaba allí ahora, presentándose con su impecable uniforme como si nada hubiera sucedido.

El reloj marcó las 8am y Taehyung se dio cuenta de que en la última hora estuvo observando a Jungkook como si su vida dependiera de ello. Habría sido razonable obtener un llamado de atención del profesor por no concentrarse en su propio examen, pero el señor Wang no llegó a percatarse de su excesiva distracción.

«Taehyung, el examen, ahora»

Aludiendo al máximo de voluntad, se forzó a sí mismo a concentrarse en las derivadas que debía resolver. El cálculo nunca representó un problema para él, sin embargo, en ese momento lo hacía. Sólo quería volver a mirar a Jungkook y embriagarse con su presencia por raro que eso sonara. 

Taehyung era consciente de lo mucho que lo extrañó en esas semanas, pera la imperiosa necesidad de observarle y sentirle muy cerca reveló que estaba absolutamente perdido por él.

«¿Por qué tuve que alejarte de mí, Jungkook?»

9am, no había tiempo para arrepentimientos.

Se levantó para entregar su examen e hizo un innecesario recorrido a través del pasillo izquierdo del salón sólo para tener que caminar justo enfrente de Jungkook. En otro momento de su vida habría estado demasiado avergonzado por buscar atención de manera tan desesperada, pero sentía que una mirada del azabache le bastaría para olvidar el asunto y empezar el examen de física con una mente renovada.

—Aquí tiene, profesor Wang. 

Dejó que la hoja se deslizara lentamente entre las manos de su profesor, más tiempo de pie podría darle una mayor oportunidad de ser notado por Jungkook. Sin embargo, para ser completamente honesto con sí mismo, era obvio que él lo notó desde que ingresó al salón, simplemente estaba tan enfadado como para decidir pasar por alto su existencia.

Two Loves | KookV♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora