Capítulo XXI: El Mito de Sísifo - Parte I

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*Hace una reverencia*
Ah... mil disculpas por atrasarme tanto. No, esta historia no quedará con hiatus, no me lo permitiría. Definitivamente, ha llegado más lejos de los que creí, pero disfruto mucho escribiéndolo, y pues, es mi fic más largo. Y es que, no puedo dejar de lado muchas cosas, ya que conforme he crecido, me doy cuenta que hay muchos factores importantes en las relaciones (algo que no sabía). 

Bien, he tenido mucho trabajo en estos días, además de mi ya urgida graduación n_n así que, celebro con la publicación de este capítulo, que tiene algunos tintes que me han marcado a lo largo de mi juventud: Camus, y su existencialismo.

Imagen por Kei (@KEI_42001 en twitter)

En fin, disculpas la demora. Que lo disfruten.


~°~°~ Capítulo XXI: El Mito de Sísifo ~°~°~

~°~ Parte I ~°~

—No creí decir esto, pero creo que ahora te necesitaré más que nunca —expresó el griego.

—Y por mi cabeza nunca pasó que lo pidieras –dijo el rubio, buscando fastidiar a su interlocutor. Su intención cambió al ver aquel rostro acongojado.

—Supongo que Kanon te contó... sobre mi condición... —dijo Saga desviando su mirada.

—¿Tu adicción al trabajo? —cuestionó Radamanthys luego de unos segundos de remembranza sobre algún dato relevante que le hubiesen compartido. —¿Que tu pareja es...

—Ya —interrumpió Saga para evitar hablar de su actual relación con Aioros. No la negaba, simplemente era una persona muy reservada. —Nada de eso —suspiró. Se aflojó su corbata y arreglaba el cuello de su camisa, claramente, no se sentía cómodo con lo que quería comunicar. —Hace muchos años, me diagnosticaron con bipolaridad. He estado en tratamiento, pero últimamente he tenido que recurrir a un aumento de medicamentos... y temo que no pueda estar estable en ciertos momentos.

—Lo lamento —dijo sinceramente, sorprendido. —Juro que tu hermano no me dijo nada al respecto —indicó en defensa del gemelo. Supuso que era un asunto entre ellos.

Durante estos dos meses habían compartido y congeniado más que en los dos años que llevaban de conocerse. Actualmente, Radamanthys no debía interferir con los asuntos legales referentes al acontecimiento donde Kanon resultó herido. Por abuso de poder, Saga fue relegado del caso, indicando que era lo más sano para él. Aunque tuvieran al perpetrador tras las rejas, aún no podían encontrar a los autores intelectuales del hecho.

—Necesito que cuides de Kanon cuando yo no esté estable... cuando yo no pueda.

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Algunas ocasiones sentía que su mente viajaba más rápido que su cuerpo, otras, sentía que era al revés. Al regresar a su casa, a su habitación y a su cama, se sintió enormemente aliviado, aunque no tuviera recuerdos exactos del lugar. Algunos días se quedaba en la casa de Radamanthys, y por ello cuestionó a su hermano, quien le respondió con un "es lo mejor". Supuso que él era una carga demasiado pesada solo para Saga.

La primera noche en aquel apartamento ajeno, experimentó una incomodidad y un nerviosismo que lo ahogaba. Todo había transcurrido con naturalidad, y durante la preparación de la cena ocurrieron ciertos incidentes cómicos. Sin embargo, cuando Radamanthys le indicó el lugar donde dormiría, no supo cómo reaccionar.

Una cama tamaño Queen era la única que se encontraba en la habitación. Cuando vio a Radamanthys vestido con una pijama de color vino tinto, comprendió que no dormiría solo.

Drákos AgóraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora