THE UNSENT PROJECT ; jinson

PARTE ONCE

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"To: JACKSON

Pensé que podríamos ser algo más que amigos. Obviamente me equivoqué. Te echo de menos"

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6 de octubre de 2015 — 23 años

JinYoung no se dio cuenta de que sus pequeñas vacaciones se habían sentido como un descanso mental de todo lo que había sucedido últimamente. Lo último que recordaba es que llevaba años suspirando y follando su puño pensando en su mejor amigo (por horrible que sonara, era cierto) y luego, ambos habían gastado tantos condones que era vergonzoso. Lo cierto era, que no tenía idea como se suponía que debía enfrentar esto. 

Era una situación que ni en sus más perversos sueños había pensado, y no tenía idea cómo abordarlo. Joder, no tenía idea de si quería afrontarlo siquiera. Por una parte, sería lo correcto ser un adulto al respecto y conversarlo, poder decir que lo llevaba deseando desde que tenía dieciséis y pensaba con la polla y que ahora era algo mucho más fuerte que en ese entonces, pero pensar siquiera en ser rechazado lo ponía enfermo. Y no sólo en el sentido figurativo de la palabra. Su estómago se revolvía y sentía nudos que lo querían hacer vomitar, si eso pasaba, él no estaba seguro de poder fingir que estaba bien por el bien de su amistad. 

Trazaba un límite en eso.

La otra opción, la cobarde era simplemente hacer nada. Dejar que todo siguiera su curso y no irrumpir en eso. Eso no era exactamente lo ideal, pero JinYoung nunca había sido valiente, y sus hermanas siempre habían pensado de él mejor de lo que realmente era. Entonces, eso lo dejaba sin muchas opciones. 

Mientras escuchaba las ruedas de su maleta resonar en el pasillo de su edificio, JinYoung pensaba que no tenía más tiempo para seguir pensándolo. Fuera como fuera, probablemente todo se definiría ahora. JinYoung se detuvo frente a la puerta de su departamento y tomo un respiro profundo. Ya había tratado de demorar todo lo posible el llegar a su departamento, pero había un punto en el que era ridículo seguir esperando cuando no se podía más y él lo sabía. Fingió que no encontraba sus llaves y después de unos minutos demasiado largos, insertó la llave y entró.

Tal vez era el miedo, pero por un momento, por un infimo segundo, creyó que todo sería diferente. No fue así. Fue simplemente familiar ver su departamento. El lugar limpio como cada vez que Jackson estaba ahí solo y el mismo Jackson sentado en el sofá viendo algún juego de basquetbol, con una de esas camisetas que eran terribles para su cordura y esa sonrisa dulce que gritaba hogar. 

JinYoung fácilmente podía fingir que estaba llegando del trabajo para ser recibido por su amado. En cierto punto, así era. 

—Llegaste —dijo Jackson, poniéndose de pie.

—Lo hice —respondió tontamente él, y el mas pequeño se acerco sin el miedo que él sentía, porque él era el valiente de los dos y lo rodeó con sus brazos.

JinYoung gimió por la comodidad y la felicidad instantánea que esto, algo tan simple como un abrazo le produjo. Se sintió como respirar bien otra vez. Como el sol tibio en la cara y todas las cosas buenas del mundo. Y como si no fuera suficiente, ahí estaba Jackson, su voz, suave y honesta. A quemarropa y sin titubeos, agregando:

—Te extrañé. 

Y era tan simple como eso. No había trampa en sus palabras, no había una maraña de mentiras medio cubiertas como era su caso siempre, Jackson no tenía la mente para hacer algo como eso, y eso hacía que JinYoung quisera ser mejor también. Merecerlo. De la manera que fuera.