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PoV General

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PoV General

La misma mujer que hace unos minutos casi asesina a varias personas por sus comentarios hacia sus pequeñas, ahora se encontraba reposando bajo la luz de la luna mientras veía a unas tiernas niñas dormir plácidamente; con lindas sonrisas adornando sus rostros y acurrucadas entre si, dando una imagen que calmaría el alma de quien sea

Fidelma: ¿Por que me detuvieron? -Pregunta toda indignada por la firme postura de su marido y la señora presente-

Aldous: Serán una bola de inútiles sin cerebro, y nos estaríamos ahorrando algunas bocas que alimentar si los descartamos

Caelia: ¡A-Aldous!

Aldous: Pero no quiero darles ese ejemplo a las niñas

Fidelma: .... E-Eso... -Se ve completamente desarmada e incapaz de alegar- 

Aldous: ¿Quieres que tengan la idea de que todo puede ser resuelto a la fuerza y que hagan todo de esa forma en el futuro?

Fidelma: No quiero.... ¡Bien!, supongo que lo dejare pasar por ahora... 

Rin: Nya~ -Se mueve un poco de su lugar con su típica sonrisa gatuna-

Fidelma: No quiero darles un mal ejemplo, únicamente quiero protegerlas con todo mi ser

Aldous: Yo pienso igual querida -Su sonrisa se engrandece cuando la castaña acaricia a Rin en un gesto genuinamente maternal-

Caelia: Me despido por hoy, que descansen -Luego de una reverencia esta se retira más tranquila al saber que no habrá una pelea entre aquel grupo de idiotas y sus conocidos que son aventureros veteranos con una gran experiencia-

Al final lograron llegar a la ciudad sin más bajas, esperando que les brinden un nuevo lugar al que llamar hogar; Yoshiko encontró calma en su ser ya que el señor de la ciudad era justo asi que no trataría mal a los refugiados; y lo más reconforta...

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Al final lograron llegar a la ciudad sin más bajas, esperando que les brinden un nuevo lugar al que llamar hogar; Yoshiko encontró calma en su ser ya que el señor de la ciudad era justo asi que no trataría mal a los refugiados; y lo más reconfortante es que ese hombre, sin miedo ni duda declaro que no tomaría partido por ningún príncipe ni princesa

Esta persona acepto con nula resistencia; pero se vio obligado a pedir que los peleadores se sumaran a la defensa de la ciudad, los herreros trabarían inmediatamente en la forja para crear y dar mantenimiento a los equipos; y las personas con habilidad para los negocios trabajaran en su campo, pero sin tener una vida tan buena como a la que estaban acostumbradas por motivos de escases

¿Otro mundo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora