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– El día de hoy hubo una horrible masacre en un banco importante de la ciudad, las autoridades han acudido al lugar de la tragedia y las imágenes que hay son espantosas, se creen con casi total seguridad que la banda criminal Misfit han sido los causantes de este tragico suceso, Qian Kun el jefe se la policía aún no ha dicho nada al respecto, esperamos una declaración por parte de él y el presidente, los mantendremos al tant–
La televisión fue apagada, seguida de un cansado suspiro
Kun desde su silla maldecía en silencio antes de darle un fuerte golpe a la mesa frente a él
– Que mierda estaban pensando Renjun?! Cómo quieres que los defienda ahora?! Siete muertos, SIETE MUERTOS HUANG, esta vez se salieron se control - dijo profundamente preocupado por todos los problemas que aquello atraería
– Changmin aún es un chico joven y comete errores... Además esos tipos estaban en nuestro camino, que querías que hiciéramos? Solo.. dejarnos atrapar? No lo creo - dijo antes de soltar una pequeña risa sarcástica, Huang se puso se pie, acercándose a Qian quien solo veía atento cada uno de sus movimientos y no puedo hacer demasiado en cuanto tuvo a Renjun sobre sus piernas - Te ayudaré a resolver esto Kunnie... Te daré pruebas para inculpar a otro grupo criminal, tu solo tienes que hacer que la evidencia que nos culpa a nosotros desaparezca, si? Lo harías por mi? - susurró de forma coqueta antes de acercarse peligrosamente a su rostro, acarició su mejilla con suavidad y lo miró a los ojos
Qian se relajo al sentirlo tan cerca, ese chico enserio era un pecado y le encantaba, suspiro cansado y asintio - bien, aunque tienes que saber que es difícil borrar las pruebas cuando las mierdas explosivas de Na tienen un puto sello
– shh, no te han enseñado que maldecir es malo Kun? Anda, relájate, sabes cómo es Jaemin, necesita dejar su marca en todas partes - dijo antes de juntar ambas frentes y darle un besito - tendré todo lo que necesitas para mañana... Tranquilo cielo, te prometí que también tendrías tu parte cierto? – dejo una bolsa llena de billetes sobre su mesa antes de quitarse el suéter que traía puesto - todo eso es tuyo.. puedes hacer todo lo que quieras con eso, incluso puedes hacer como si fueras a apoyar ese banco.. aunque no es como que les haga falta, este lugar está lleno de escoria con dinero, perder algunos apenas unos miles de dólares no es demasiado para ellos, no recordaba que en esta parte de la ciudad fueran tan llorones..
– Dios, jun, estás loco - soltó una risa ante sus palabras - pero no puedo negar que tienes razón... - dijo mientras sentía como su camisa comenzaba a ser desabotonada - hey, estamos en mi oficina, controlate
– si vuelves a darme órdenes juro que le diré a Jaemin que vuele en pedazos la academia de policías - gruñó, antes de comenzar a besar a Kun
Y Kun se dejó llevar por los besos de Renjun, acariciando suavemente su cintura
