El Elegido (m-preg) Doncel / sasunaru - Charamen

Mi marca

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Al escuchar aquel nombre, el azabache se alejo del pequeño

Sasuke: veo que ya reaccionaste, iré por curandero.

Naruto: ¿dónde, dónde estoy?

Sasuke: todo a su debido momento

Sin esperar respuesta salió de la habitación....

Naruto: Menma, dónde estás hermano ...

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El curandero salía de la habitación del pequeño y al cerrar la puerta dos adultos lo estaban esperando.

Sasuke: ¿Cómo está!

Óbito: por ahora bien, tu sangre a borrado todo rastro del veneno y ayudo a sus defensas a regenerarse, eso evitará futuras infecciones.

Mikoto: ¿Por qué dices .. por ahora?

Óbito: porque todos sabemos que si no se realiza él último ritual, el pequeño tendrá una baja en su organismo y puede caer en un profundo sueño eterno.

Mikoto: entiendo, hijo (mirando al azabache), deberás informar al pequeño de lo que ha ocurrido y lo que pasará en adelante.

Sasuke: pues no le veo nada malo que duerma para siempre.

Óbito: sabes que tú también tendrás ese destino.

Sasuke: tsk, son supersticiones, nada me pasará.

Óbito: si quieres hacer la prueba, adelante, solo no olvides que el siguiente en la lista de sucesores es Charasuke

Sasuke: ese no es un demonio

Óbito: pero tiene la sangre del último líder, por lo tanto tiene él mismo derecho que tú.

Mikoto: Sasuke hará las cosas bien, ¿No es así hijo?.

El azabache solo gruñó.

Óbito: será para mañana, ahora le di a beber un poco de hierbas y dormirá profundamente, no olvidemos que aún está en recuperación

Sasuke: genial, deberé esperar a que la princesita se digne a levantarse, me largo.

Sin más se retiró, dejando a los dos adultos

Óbito: se acostumbrara a la vida de casado.

Mikoto: hubiera preferido una pequeña ceremonia

Óbito: lo se, eres madre, pero nada podemos hacer, el destino así se manejo.

Mikoto: ve a descansar, pondré a Sakura para que cuide al pequeño

Óbito: ¿La esposa de Sai?

Mikoto: si, confío en ella para el cuidado del pequeño

Óbito: buena elección, ella es una híbrida, su lado humano podrá conectarse con él del pequeño.

Mikoto: iré ahora mismo hablar con Sai, debe estar aquí mañana a primera hora.

Óbito: entonces me retiro, pasaré a ver al pequeño antes de la comida.

Mikoto: gracias Óbito y por favor, mantengamos la unión de mi hijo en secreto, muchos subordinados tratarán de hacerle daño.

Óbito: lo haré majestad, se de más de un demonio que deseaba desposar a su hijo.

Mikoto: la seguridad de ese pequeño es de vital importancia, no solo por la seguridad de mi propio hijo, sino, por la amistad que tenemos con el zorro, nunca me perdonaría perder su confianza.