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Entraron a la habitación y SeokJin se encargó de recostar gentilmente a su novio, ambos al fin separandose pero sus labios uniéndose por un pequeño hilo de saliva. —Yoongi, ¿Puedo hacerte mío? —preguntó SeokJin con algo de vergüenza y se notaba en su tono de voz, estaba nervioso.

YoonGi le miró a los ojos y luego le sonrió, le dió esa sonrisa que a SeokJin tanto le gustaba, paseó sus manos por todo el torso del mayor y las detuvo en los botones de su camisa.

—Soy todo tuyo, SeokJin.

Ambos volvieron a besarse lentamente, sin ninguna prisa por empezar, disfrutando de cada segundo. No fue hasta que SeokJin pidió permiso para entrar a la cavidad bucal del otro, explorando cada parte y saboreando esos labios.

YoonGi por otra parte comenzó a desabotonar uno a uno los botones de la camisa ajena, dejando al descubierto el pecho del mayor y acariciando cada parte de su abdomen. SeokJin se separó de los labios de su chico y le sonrió tímidamente mientras se quitaba por completo la camisa y la dejaba caer al suelo, llevó sus temblorosas manos a los bordes de la camisa de Yoon para subirla poco a poco hasta dejarlo semidesnudo.

Siguieron un poco más con los besos tiernos que se fueron convirtiendo en besos húmedos llenos de intensidad y ansiosos por más, YoonGi acarició la ancha espalda de su novio quien comenzó a darle besos en su cuello y jugaba con el lóbulo de su oreja con su propio lengua.

—Hoy planeo que no olvides está noche. —susurró Kim cerca del oído del más joven para después alejarse y llevar sus manos hasta el borde de los pantalones de este mismo.

Deshaciéndose de estos mismos y de los suyos, ambos quedando con solo el boxer. YoonGi admiró aquella vista, era simplemente majestuoso, sabía que SeokJin era alguien atractivo pero verlo sin ninguna prenda mientras sus cabellos estaban desordenados y su respiración era algo irregular; sin duda era la mejor imagen que mantendría grabada en su mente.

—Definitivamente eres un ángel. —confesó SeokJin al ver el desastre en el que había convertido a su novio, notando incluso que su piel se veía más frágil sin ninguna prenda estorbando. —Mi angel —volvió a repetir antes de volver a besar los labios que tanto le encantaban.

Min sintió una extraña sensación, palpitaciones en su miembro cuando los labios de SeokJin fueron creando un camino de besos desde el cuello hasta el abdomen, necesitaba más, ambos necesitaban más.

—Me encantas tanto. —dijo el mayor cuando al fin acarició la erección de su novio por sobre la tela, Yoon solo cerró sus ojos y dejó escapar unos cuantos gemidos por aquel tacto.

—Espera —lo detuvo el más joven, se sentó sobre su mismo lugar y estiró su brazo para abrir el buró a lado de su cama y sacar algunos productos del cajón.

—¿Tenías todo preparado? —preguntó Jin con diversión al ver la botella de lubricante y la caja de condones, su novio solo le dió un pequeño pellizco para que dejara de mirarle de esa forma—. Está bien, pero YoonGi, yo jamás había hecho esto con un hombre así que por eso me gustaría saber que lugar quieres tomar.

—¿Eso importa?

—Bueno, quiero hacerte sentir bien, quiero que lo disfrutes. —respondió el hombre mientras acariciaba la mejilla ajena, depositando tiernos besos en todo el rostro de Yoongi.

—En ese caso, quiero que tú lleves el control, quiero sentirte dentro de mi. —fue lo que respondió el contrario antes de besar con intensidad los labios de Kim, este llevó una de sus manos al cuello contrario para tomar el control del beso.

Ahora fue YoonGi quien quitó la última prenda que les quedaba, al fin estando completamente desnudos, su mirada cayó en la evidente erección del mayor y luego lo miro a él; estaba nervioso y lo entendía. SeokJin jamás había imaginado que tendría esa clase de intimidad con un hombre, era algo nuevo que estaba experimentando.

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⏰ Última actualización: Jul 20, 2022 ⏰

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