Pudimos Haberlo Tenido Todo | Izuocha

•Negación•

Advertencia: Este capítulo contiene escenas que pueden ser nocivas para el lector, además su narración será desde personaje primario, así como también desde narrador omnisciente. Me encantaría ver sus comentarios y reacciones de que les parece este fic✨ Nos vemos en la siguiente!

~Y en el viento, puedo escucharte decir mi nombre, conservé el sonido...
Estoy perdido...
Estoy perdido.~

- Iz... zu...- el viento hizo eco del débil sonido que salía de su voz y un escalofrío horrible me recorrió el cuerpo cuando cerró sus ojos mientras se quedaba completamente quieta.

- ¿Ochako?...

Mi voz apretada revelaba el gran terror que empezaba a crecer en la boca de mi estómago...

- no, no, no, no, no- dije con nerviosismo mientras sacudía sus hombros levemente- abre los ojos, abre los ojos.

Tenía que hacer que sus ojos se abrieran, debía salvarla, no solo porque era mi responsabilidad sino porque también era mi amiga, Uraraka-san fue mi primera amiga real después de Kacchan...

Izuku Midoriya, es una certeza de que estoy enamorada ti...

"¡No es momento para recordar eso! Izuku ella es tu amiga, ¡¿cómo no vas a poder salvar a tu amiga?!"

- te dije que no te durmieras...- empecé a apretarla con fuerza, intentando despertarla a causa de la presión y no dejaba de repetir- Ochako abre tus ojos... por favor, por favor... no dejes que el sueño te gane por favor...

"Le dije que no cerrara los ojos, no puede dormirse..."

- Ochako solo abre los ojos, ya viene la ambulancia pero aguanta...

Miré desesperado entre lágrimas y sollozos a mi alrededor esperando algo, un avistamiento de pronto auxilio, pero nada...

Volví mi mirada a su rostro sin expresión, a su cuerpo quieto y un dolor en mi garganta comenzaba a formar sollozos a causa del pánico, que sentía por todo mi cuerpo.

- por favor, por favor...- repetía nuevamente, esta vez rogando a algo superior...

No podía perder a Ochako... no a ella.

"No..."

En ese momento, la cordura empezó a traicionarme...

- no... No.

Negaba con mi cabeza violentamente mientras apretaba aún más mi agarre.

- no estás m... -no podía decir siquiera la palabra- no estás...

Volví a observar sus párpados cerrados sintiendo rabia, enojo...

"Ya basta... tienes que abrir los ojos, ¡tienes que abrir los malditos ojos!"

- ¡URARAKA-SAN POR FAVOR!- la apreté con fuerza y agite bruscamente sus hombros.

Me vi con terror a mi mismo por lo que acaba de hacer.

- ¡lo- lo siento! Lo siento... ¡esta bien!- no podía calmarme, seguía aterrado. Sequé mis lágrimas con brusquedad y volví a cargarla en mi brazos tratando de ser lo más suave posible- esta bien... Puedes dormir un poquito...

Al ver que ya no sangraba, saque el tubo que le atravesaba para poder sostenerla mejor.

- esta bien, pu-puedes dormir un ratito solo, solo prométeme que despertarás cuando llegue la ambulancia ¿si?